El juego de quererte en secreto [Chiara OT 2023]

Verdadera familia

Llegaron a la academia exhaustos, cansados de todo el día y con muchas emociones por descargar. Llegaron para las cuatro y media, y harían el segundo pase de micros a eso de las seis, más o menos. 

Chiara apareció allí con una pequeña sonrisa, y corrió a abrazar a Elizabeth, sin fijarse en nada más. La rubia correspondió al abrazo y Chiara se colgó de ella como si fuese un koala, para después ambas reír y la pelinegra separarse un poco de ella, frunciendo el ceño, confundida.

─ ¿Por qué vuelves a tener la mejilla de colores?

─ Verás, es que...

─ ¿Y por qué Ruslana tiene una venda en su mano? ─ Preguntó mirando hacia Elizabeth, la cual hizo una suave mueca.─ ¿¡Ruslana te ha pegado?!

─ ¿¡Pero qué dices, guiri?! ─ Exclamó Ruslana, ofendida de que le acusen de algo así.─ Claro que no, yo solo le pego de broma.  

─ Comando Zaragoza, ¿podéis venir conmigo un momento, si us plau (por favor)? ─ Los cuatro asintieron suavemente ante las palabras de Noe, sabiendo qué pasaba. Elizabeth dejó un beso sobre los labios de su novia, con una pequeña sonrisa, tratando de no preocuparla.

─ Luego te cuento, ¿vale? ─ Chiara asintió suavemente y siguió a Elizabeth con la mirada, mientras esta se iba junto con los otros tres.

─ No creerás que Ruslana le ha pegado, ¿no? ─ Preguntó Martin, y Chiara, sin apartar su mirada de allí, negó.

─ Claro que no, I was kidding.─ Le pelinegra miró a su mejor amigo, algo preocupada.─ Pero vuelve a tener la mejilla de colores... 

─ No te preocupes, sea lo que sea me apuesto cualquier cosa a que Naiara, Juanjo y Ruslana lo han solucionado.─ Aseguró Martin, tomando a su mejor amiga por los hombros, la cual suspiró, precupada.

─ Eso espero...

Mientras tanto, el comando Zaragoza siguió a Noemí hasta su despacho, y la mayor, según cerraron la puerta, se acercó a Elizabeth, tomándola de las mejillas y revisándole toda la cara, notando que tenía, de nuevo, color en su mejilla.

─ Ay, amor...─ Murmuró la mayor, abrazando a Elizabeth, mientras miraba a los otros tres.─ Me han contado lo que ha pasado un poco por encima, pero, ¿podéis darme detalles?

Los cuatro se miraron y empezaron a contarle todo, desde cuando llegaron hasta cuando se fueron, con los detalles más detallados que podían, mientras Noemí cerraba los ojos y suspiraba, negando suavemente, sin entender como podía existir gente así en este mundo. 

─ Vale, a ver... ─ Miró hacia Elizabeth y juntó sus manos.─ Está claro que cuando salgas de aquí, sea el 19 de febrero o antes, no vas a ir a tu casa, ¿vale? ─ La rubia asintió suavemente.─ No se a dónde irás pero eso no te preocupes, nosotros te lo arreglamos como que me llamo Noemí Galera.

─ Puede quedarse en mi casa.─ Propuso Ruslana, mirando con una pequeña sonrisa a Elizabeth.─ O en la de Chiara, seguro que estará encantada de recibirla.

─ O en cualquiera de las nuestras, siempre habrá un sitio para ella en nuestra casa.─ Afirmó Naiara, viendo como Juanjo asentía, de acuerdo con sus palabras.

─ Pero, Noe...─ Susurró Elizabeth, tragando en seco, luciendo preocupada.─ Mi hermana pequeña aún sigue viviendo con ellos, y no quiero que esté allí sola. Habría alguna manera de sacarla o...

─ No te preocupes, cariño, haremos todo lo que esté en nuestras manos y más para que tu hermana y tú salgáis de esa casa, ¿de acuerdo? ─ Elizabeth, algo más tranquila, asintió, con una pequeña sonrisa.─ Vosotros no os preocupéis de lo que pase fuera, por ahora disfrutad aquí dentro, nosotros nos encargamos de todo, ¿vale? Ahora, id a prepararos para el pase de micros.