Viernes.
⇜ Joe ⇝
—¿Ya te sientes mejor? —asiente mientras se acomoda en el sofá, observo como suelta su cabello y lo revuelve para que tome su forma natural —¿Aun quieres el coctel?
—Si... por favor, me lo prometiste —sonríe y la percibo muy tentadora.
—¿Hay algo de lo que debamos hablar antes? —saco las copas y el licor para preparar el coctel.
—¿Sobre qué?
—Sobre lo que sucedió hoy con el abogado Stan —sé que es incómodo, pero quiero resolver nuestras dudas.
—Le dejé claro que no quiero nada con él, pero me asustó con su actitud tan demandante —responde.
—¿Ha sido violento contigo? —hace una mueca y eso me llena de preocupación —Gill... ese idiota te ha lastimado.
—No... ha sido brusco, de hecho, lo abofeteé porque se pasó de la raya —regreso a ella con las copas.
—Gill, perdón que te diga esto, pero lo que acabas de decir es completamente absurdo y creo que sabes a lo que me refiero —recibe el coctel y agacha la mirada.
—Lo sé, creo que perdí el control —levanta su mirada de nuevo —. No quiero nada más con él y ya lo dejé claro, si sigue molestando tomaré medidas.
—Ok... cuentas conmigo ¿está bien? —acaricio su mejilla y Gill me sonríe de vuelta.
—Olvidémonos de todo el mundo esta noche, que se vayan al infierno —escucho una linda risa, me encanta como sus pómulos se elevan tanto que sus ojos casi se cierran por completo —. Quiero estar contigo, solo contigo —murmura y en seguida choca su copa con la mía.
Aflojo la corbata, sus ojos siguen el movimiento de mis manos, adoro esa pequeña sonrisa en su rostro, pero más adoro el brillo que sale de su mirada, no sé exactamente como llamar lo que hay entre los dos, pero estar con ella me hace sentir vivo de nuevo, Gill tiene una magia interna que me atrapa, tiene un balance perfecto entre sus palabras y sus acciones, me enreda en sus encantos soltando poco a poco señales sutiles que traduce en miradas, caricias o palabras.
—¿Necesitas ayuda? —empezó a desabrochar mi camisa, juega acercándose a mis labios, en el momento que iban a rozarse, cambió la dirección y su boca terminó en mi cuello. Se me escapa una pequeña risa, a eso me refiero, con ella su próximo movimiento siempre será una incógnita.
—Tu trasero se ve muy bien con ese vestido —enredo mis dedos en su cabello mientras ella sigue besando mi cuello.
—¿Solo te fijaste en mi trasero? —niego con mi cabeza, su mirada vuelve a la mía, acaricia mi pecho y mi abdomen permitiéndome sentir la suavidad de sus manos.
—Me fijé en todo —llevo un pequeño mechón detrás de su oreja —. Me encantas, Gill —planto un beso suave en sus labios perfectos —quiero recorrer tu cuerpo y besar cada parte de ti.
—Joe, ¿aun quieres tener algo más allá de sexo? —de nuevo encuentro dudas en su mirada.
—Por supuesto —acaricio su mejilla con los nudillos —¿Qué es lo que te hace dudar?
—No lo sé —susurra y enseguida desvía su mirada. He descubierto sus inseguridades y son de las que el idiota de Sebastian se aprovechó.
El miércoles que llegó en la noche llorando, me dijo que nadie la había amado y estoy seguro de que eso es lo que le siembra dudas.
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Strange Addiction - Joseph Quinn | Sebastian Stan +18
Fanfiction⚡Mentiras, secretos y engaños; todos tienen un precio que pagar. Gill cree tener el control hasta que Joe llega a cambiar sus convicciones, sin embargo, Seb hará lo posible para que ella no se le escape de las manos. ¿Hasta dónde están dispuestos...