CAP 9

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Mis párpados comenzaron a abrirse debido al fuerte ruido que provenía de la entrada. Alguien golpeaba la puerta a puño cerrado, una y otra vez.

Me senté sobre el sofá intentando despertarme, qué clase de lunático tocaba la puerta tan temprano y de ese modo.

-Quién es? -grité molesta.

-Akane, abre. - Escuché a Nanami.

Suspiré. Me levanté a abrir la puerta y regresé al sofá de inmediato a continuar durmiendo.

-Akane? - Nanami entró y dejo unos tápers de comida sobre la mesa de la cocina.- ¿Por qué tu celular está apagado? ¿Qué pasa?

-Pasa que me acabas de levantar de un susto.

-Me dijiste que hoy almorzaríamos juntos.

-Qué hora es?

-Más de mediodía.

- ¿Qué? - Levanté mi teléfono. Había olvidado que lo había apagado.

-Qué sucedió anoche?

Negué con la cabeza, no quería hablar de eso.

-Revisa en el primer cajón de la alacena. - le pedí. - Hay una llave del departamento. Quédatela.

Nanami tomó la llave y la guardó en su chaqueta. Se acercó a la sala y abrió las cortinas y ventanas. Los rayos de luz casi me cegaban, estaban haciendo que me despierte a la fuerza.

-Nami. - lo llamé. - Soy una mala persona?

-Qué?- Me miró confundido.

Hace mucho que me hacia la misma pregunta, la ignoraba sin tratar de darle importancia, pero ahora sentía que quería una segunda opinión.

-Es que, yo creo que no lo soy. - me incorporé sobre el sofá para sentarme. – Odio lastimar a las personas. Trato de vivir en paz sin buscar problemas, y sin embargo muchas veces no entiendo por qué me pasa lo que me pasa. ¿Acaso estoy mal?

Nanami suspiró y se sentó a mi lado.

-No eres una mala persona, Akane. Pero veo que muchas veces quieres solucionar todo a tu manera y cargas con cosas que no son tu responsabilidad.

-Quieres decir que yo me busco eso?

-No. - negó con la cabeza. - Quiero decir que esas cosas llegan a ti y en lugar de establecer tus límites, aceptas la responsabilidad.

Nunca lo había visto de esa manera, a veces hablar con él podía ser bastante terapéutico, me ayudaba a ver las diferentes aristas de un problema.

De pronto mi celular vibró. Había llegado un mensaje.

Yuri.

-Por ejemplo, Yuri- respondí. - Haría lo que sea por ella, porque la amo y a la vez veo mucho de mi en ella.

-Lo sé.

-Pero ahora simplemente no quiero verla, es como si le guardara rencor de alguna u otra forma.

-Es normal. No te sientas mal por lo que sientes. – rió. - Ya es suficiente con todo lo que estas haciendo por ella.

- Sé que no la volveré a ver después, y también sé que me las arreglaré de una u otra forma, pero no puedo evitar pensar, ¿por qué las personas a las que más amor le entrego se van?

- Te refieres a él, ¿cierto?

-Sí. - suspiré. - No lo extraño, sin embargo, pienso seguido en la razón por la que se fue.

-Seguido?

-Naoya ayer lo mencionó en la cena, insinuó que quizás me había puesto muy intensa con él.

SUSURROS DE POESÍA | OC x Suguru GetoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora