CAP 19

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Geto Suguru

Tokio

20:11


Era viernes por la noche. Saludé al recepcionista del edificio mientras caminaba por el lobby en dirección al elevador.

Subí hasta el piso siete y toqué el timbre en la primera puerta del corredor.

Nanami abrió y me invitó a pasar.

-¿Como has estado, Geto? – preguntó una vez nos tomamos asiento.

-Un poco cansado. Salí a una misión por unos días y recién regresé hoy temprano– respondí.

-Me sorprendió que llamaras. Ha pasado un tiempo desde tu última visita.

-Gracias por recibirme con tan poca anticipación.

-No hay problema. – Nanami se levantó y trajo dos tazas de té, colocó una frente a mi y bebió un poco de la otra.

No quedamos en silencio unos segundos hasta que me animé a preguntarle si había logrado comunicarse con Akane durante la semana.

-Sí, hablamos por teléfono ayer. Esta fascinada con Taiwán.

- Me alegro. – respondí.

Honestamente me alegraba que estuviera disfrutando su estadía allá, aunque me hubiera alegrado más que ella misma me lo contara.

- Escuché que a su regreso se casará con Naoya Zenin.

Nanami negó con la cabeza, como cuando ya estás cansado de escuchar lo mismo una y otra vez.

-Por desgracia, eso es cierto.

-Veo que tampoco te agrada la idea.

- Se unirá a una de las familias más conservadoras y pedantes del mundo de la hechicería. Tú sabes como la tratarán allá. Las mujeres para los Zenin solo sirven para una cosa, fabricar bebés y hacer crecer el clan. - la mano de Nanami se tensó en un puño sobre la mesa conteniendo su furia. - No planeo responsabilizar a Yuri, es solo una niña siendo manipulada por su madre. Ella sabe que Akane jamás se casaría si no estuviera Yuri de por medio.

-Yuri manipuló a Akane? - pregunté.

-Tal vez con culpa, pero sí. A petición de su madre. Es lo que puedo concluir. Desde que se enteró del compromiso que tenía con los Zenin, Akane cambió. Dejó de hablar sobre los planes y proyectos que tenía a futuro, como si viviera resignada a un destino que no eligió.

La rabia y la impotencia me embargó al pensar en la idea de Akane viviendo una vida miserable bajo el techo de los Zenin.

-Sabes lo que respondió cuando le pregunté donde sería la boda?

Soltó una risita mientras tomaba otro sorbo de té.

-< ¿Por qué? ¿No quieres perderte la fiesta?>- rió.

Sonreí al recordar exactamente el gesto que hacía Akane al lanzar las típicas respuestas sarcásticas. Las cejas un poco levantadas y una sonrisa coqueta como si no le molestara hablar en lo mínimo sobre el tema en discusión.

-Siempre responde así cuando quiere evitar hablar de algo sensible para ella, así que cortamos el tema. - prosiguió.

Miré a Nanami con una sonrisa forzada, intentando salir del laberinto mental que podría darme una solución al destino de Akane.

-Crees que, si encontrara a alguien que la ame, ¿la haría cambiar de opinión? - pregunté.

-A qué te refieres? – respondió confundido- Alguien como un novio?

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⏰ Última actualización: Apr 11 ⏰

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