The Air That I Breathe

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"Así que duerme, ángel silencioso
Ve a dormir
A veces, todo lo que necesito es el aire que respiro
y amarte"
The Hollies


Faltaba un mes para las vacaciones de navidad.

Era noviembre y el frío comenzaba a manifestarse poco a poco, Nathan adoraba aquello ya que sentía una tranquilidad enorme al frío azotar su rostro, enfriando su nariz, recordando su anterior casa en Austria.

Se habían mudado recientemente y se había enterado gracias a que su madre le envió una carta regañándolo por tener varios libros de su padre escondidos en su habitación y lo peor de todo eran libros que hablaban sobre los orígenes de la magia, su formación y del cómo crearlas.

Aunque no era instructivo, debía de ser bastante observador e intentar con un hechizo ya establecido, entenderlo y saber si se puede modificar o no.

Había uno en todo Hogwarts que sabía como se crea hechizos, el único problema es que es difícil de tratar, esta ensimismado consigo mismo odiando a todo el mundo y, lo más importante, es base de magia oscura.

Lo último no es tan grave para Nathan pero últimamente tiene ese presentimiento que el director está más atento con él y que el rencor de la profesora Mcgonagall ha incrementado mucho más, debido a que la mano de James Potter sigue herida.

Gracias a eso, se ha dado cuenta que las emociones tienen mucho que ver a la hora de lanzar un hechizo, parecido en cierta forma a los hechizos imperdonables. Cuando le enseñaron a lanzar un cruciatus, lo primero que le dijeron era:

"Necesitas la intención para ver la reacción"

Si odias tanto a alguien y lo quieres ver sufrir, el hechizo saldrá rápido. En un abrir y cerrar de ojos estará en el suelo gritando de dolor. De igual manera el hechizo de dominación y la asesina.

Pero el Septum que le lanzó a James fue mucho más fuerte que, según ha oído Regulus, no se ha curado con tanta facilidad, por eso recibió un castigo leve de limpiar los trofeos hasta navidad. Sin embargo, no ha dejado de mirar su mano vendada y un ápice de culpa llega a invadirlo de vez en cuando y lo detesta.

Nunca ha sentido nada de culpa en sus acciones, incluso en el mismo momento de ser expulsado, la angustia nunca llegó, aceptó a pesar de sentirse humillado y levantó la cabeza saliendo del lugar.

Pero ahora, se siente asqueroso por dejar que la culpa tome su cuerpo, James merece eso. Por humillar a su hermana y él no cree que lo perdonaría mucho tiempo.

—Está pensando en los últimos partidos —dijo Barty sacándolo de su ensoñación—. La otra semana será tu partido con Hufflepuff antes de las vacaciones.

Nathan jugueteo con su comida, meditando si darle la razón.

—A él no le importa ese partido, está pensando en los exámenes. Los TIMO están a punto de iniciar y Flitwick nos quiere desaprobar  —aseguró Charlotte al costado de Barty.

Los dos lo miraban esperando una respuesta.

—Estaba pensando en mi cumpleaños número 16 —murmuró Nathan metiendo una buena porción de carne a la boca—. No quiero que mis padres hagan una fiesta.

—¿Y por qué? —replicó Charlotte—. Sería divertido.

—Lo menos que quiero es verles la cara a mis tíos, y a toda esa gente... —movió la cabeza de un lado al otro—. Solo una cena familiar y soy el chico más feliz del mundo.

—Que aburrido eres —murmuró Charlotte frunciendo el ceño—. Muy bien que te divertías en la fiesta de Lockhart.

Tragó con dificultad.

CHANGES¹ | James PotterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora