Cuando Menos Te Lo Esperas [MoonSun] #1

Capítulo 12

El fin de semana de Hangouts —también conocido como el fin de semana del Día de la Raza— siempre ha sido un momento en el que Byul y sus amigas renuncian a sus rutinas normales.

Sonríe mientras responde al mensaje de grupo sobre quién lleva, qué para cuando se dirijan allí dentro de dos días, y está más que preparada para unas vacaciones.

—¿Y esa sonrisa? —pregunta Yongsun mientras se carga su propia mochila al hombro y Hana recoge la suya, lista para irse a casa a pasar la tarde.

Presenciar esto la hace sonreír involuntariamente aún más, porque Yongsun está prosperando mientras se sumerge de nuevo en su carrera, y le encanta poder verlo.

Se sacude y muestra su teléfono.

—Preparándome para el fin de semana.

Entonces, se da cuenta de que Yongsun fue invitada al fin de semana de Hangouts.
No sabe cómo se le había olvidado que sus amigas habían invitado a Yongsun cuando la conocieron el 4 de julio, pero supone que, desde entonces, ha tenido muchas cosas en la cabeza relacionadas con Yongsun.

Puede ver en la forma en que los ojos grises se abren de par en par, y Yongsun levanta la mano para posarla en su frente, que ella también lo olvidó, incluso antes de decir:

—Lo olvidé totalmente. Quiero decir, no es que suponga que aún esté invitada. Tus amigas son muy amistosas y…

—No invitan a nadie si no es en serio —la corta con seguridad.

Lo que no es tan tranquilizador es el pánico que siente al ver cómo demonios va a mantener las reglas de distanciamiento, del último mes y medio, si Yongsun y ella van a pasar todo el fin de semana juntas.

—Ojalá pudiera ir —dice Yongsun con auténtico pesar.

Y de repente se siente aliviada. Después de todo, no va a ser un fin de semana de intentar averiguar cómo mantener su plan de superar a Yongsun sin dejar de relajarse.

—No he tenido una escapada así en… —Yongsun resopla riéndose burlonamente de sí misma, levantando las manos para tirar de las correas de su mochila. La que Byul le había comprado y que realmente usa y con la que se ve injustamente adorable—. Nunca. Me parece realmente increíble que sigas en contacto con tus amigas de la universidad.

Byul se siente inmediatamente como una gran imbécil. Sabe lo aislado que había sido el matrimonio de Yongsun; cómo, bajo el pulgar de Taeyang, Yongsun había perdido rápidamente el contacto con casi todo el mundo, excepto con su madre.

—Estaba tan ocupada que no pensé en hacer planes para Hana. Dos noches, a última hora, no es la hazaña más fácil —añade con una sonrisa triste.

—¡Me voy a casa de los abuelos este fin de semana! —Hana anuncia mientras se dirige a la sala de estar desde donde estaba claramente escuchando a escondidas en la cocina.

Se coloca entre Byul y Yongsun, mirándolas con mirada expectante.

Los ojos oscuros de Byul se fijan en los de Yongsun, e intercambian una rápida mirada en la que la confusión de Yongsun es palpable antes de volver a mirar a Hana.

—No, cariño, no he hablado con la abuela y el abuelo en unas semanas.

—Los llamé hace un par de días y les pregunté —afirma triunfante, con los ojos grises brillantes mientras mira entre Byul y Yongsun—. Me recogerán el viernes después de clase.

Yongsun frunce las cejas en señal de interrogación, ya que su hija acapara toda su atención.

—¿Cuándo lo organizaste?