Capítulo 5

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♤♤  Las palabras lástiman más que los cuchillos .

                Ellas no perforan la piel, rasgan el alma ♤♤

                        Renato Russo

Autora :

    Los dos comparten más cosas de lo que la verdad les permite que descubran.

    Tienen más en común de lo que el destino les informa, pero aún así, ambos tratan de opacar el pequeño rasgo de humanidad que los iguala.

♢Emma Foster ♢

Mis pies se mueven por sí solos como si tuvieran vida propia hacia el interior de la habitación en donde me espera mí madre. Observo su expresión y la encuentro vacía, nula, solo repara mí figura mientras me acerco a ella y sin pensarlo me abalanzo  envolviéndola con mis brazos en un intento de abrazarla pero, me aparta como si mi piel la quemara, me mira con cara de asco apuñalandome el alma con ello.

Sin poder evitarlo lágrimas se asoman en mis ojos y siento mi pecho hundirse ante la horrible sensación de sentirte rechazada y odiada por tu propia madre.

–¿Mamá? – digo en un hilo de voz,   pero todo se queda en blanco cuando me cruza la cara con una bofetada.

- Asesina - grita y se me va encima como loca pero Enzo la detiene -¿Cómo pudiste?-rompe a llorar - Era solo una niña, y tú padre te quería más que a nada - sollozos le interrumpen el habla y se rinde en los brazos de Enzo llorando descontroladamente.

Me duele, duele tanto que siento no poder respirar, se me atasca el corazón en la garganta y mis lágrimas caen sin cesar, quiero gritar, desaparecer, morir para no sentir lo que siento ahora, este sentimiento que me ahoga y duele tanto.

-Te odio - me grita con voz envenenada y esas simples seis letras me martillan el corazón hasta el punto de sentirlo romperse - ese día en que los mataste yo también morí con ellos así que olvidate de que tienes madre - dijo en un tono amargo y retrocedí como sí cada palabra fuera un golpe en el pecho, un puñetaso dado de con un puño de hierro.

No hablé, solo observé como Enzo la saca a la fuerza dando gritos cargados de odio hacia mi persona.

Antes de todo lo ocurrido pensaba que las personas que atentaban contra su vida eran ridículas, unos cobardes que no tenían inteligencia, pero aveces juzgamos sin saber los motivos ni las circunstancias que te llevan a cometer tales actos, y que cuando te sientes rota por dentro la única opción que encuentras válida para dejar de sufrir es desaparecer.

♢Iker lombardi♢

Salgo del baño después de oir una tanda de los molestos reclamos de Sara por verme con la chica de ojos negros  dentro de la ducha《Aceves llega a ser un jodido pelliscón de huevos》 me muevo en busca de los dormitorios por el largo pasillo y me detengo a mitad de este cuando mis ojos se encuentran con la mujer que se aproxima en mí misma dirección.

La reparo en silencio unos segundos y cuando veo que entreabre los labios para decir algo me le adelanto.

-¿Qué haces aquí? - pregunté curvando mis labios en una sonrisa burlona y alzando una de mis cejas.

- Así es como saludas a tú madre después de tanto tiempo sin vernos - pregunta molesta, se muestra fría como siempre su mentón en alto y sus ojos sin una pizca de humanidad, hay veces que dudo en quién sea peor si ella o papá.

- ¿Y dónde está mí madre? -bufo -dime para saludarla - contesto sarcástico y comienzo a caminar para dejarla atrás pero me corta el paso tomándome del brazo.

SálvameDonde viven las historias. Descúbrelo ahora