Felix tenia 6 años, jugaba en la tierra de un parque cercano a su casa, hasta que alguien le dijo que del otro lado había un payaso regalando juguetes, no dudo en correr, pero sintió un fuerte olor en su nariz, junto a dos brazos sosteniéndole el cuerpo.
Cuando despertó estaba desnudo en una celda, una para animales, a su lado había otros niños que estaban igual que él, algunos lloraban en silencio, otros que solo parecían muñecos que no hablaban.
Su mandíbula comenzó a temblar, estaba a punto de romper en llanto, realmente tenía miedo, mucho miedo.
—No hagas ruido.— Dijo un chico que parecía tener ¿12 o 13 años? —Si haces ruido, ellos vendrán y te golpearan.—
—Quiero a mamá.— Musitó.
Las luces se prendieron dejando ver a 3 hombres, quienes llevaban mascaras de animales.
—Él es el nuevo, un pequeño pollito amarillo.— Dijo señalando a Felix.
La reja se abrió y Felix tembló, fue jalado, comenzó a patalear, a llorar a gritar, pero entonces un golpe en su mejilla lo hizo sentirse mareado, un silencio se produjo.
—No maltrates la mercancía o si no, no pagaran bien por ella.— Dijo otro hombre y Felix se quedo en silencio. No hablo, no grito, fue obediente.
Un obediente pollito.
Abrió sus ojos con pesadez, se sentía mareado, aturdido, se incorporo en lo que parecía una cama, pero no recordaba nada, después de hablar con aquel chico. Coloco su mano en su rostro, miro las sabanas de ese hermoso color azul profundo, la delicadeza de lo que estaba a su alrededor le indico que era un lujoso lugar y no un hotel. Observó su ropa y era otra, abrió un poco los ojos, porqué entonces alguien lo cambio y vio lo que nadie debía de ver. Entro en pánico, apretó las sábanas sobre su pecho y la puerta se abrió para dejar ver a Minho con una bandeja.
—Por fin despertaste, pensé que no lo harías nunca.— Caminó hasta él y dejo en su regazo la bandeja con comida.
—Come algo.——¿Cómo llegue aquí?— Preguntó sintiéndose mareado.
ESTÁS LEYENDO
Línea peligrosa [Minlix]
FanficFelix es el playboy y modelo más codiciado del país, tiene la fama de acostarse con quien se le venga en gana, nadie se queda a su lado y nadie lo hace doblarse y rogar. Nadie hasta que llega un CEO que lo cambiara todo, uno muy peligroso. Ambos com...