Enfermo

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Jake: Mamá ¿a dónde vamos?

Verónica: A la casa de tu tío Héctor, nos invitó a almorzar.

Shawn: Espero que esta vez sea algo mejor, la otra vez compró comida porque se le quemó la carne.

Verónica: No digas eso Shawn, aparte debemos de mínimo ir por respeto.

Jake: Mamá ¿nos vamos a quedar mucho tiempo?

Verónica: Tal vez hasta las 4 o 5, llegar a comer e irnos no es muy cortés que digamos...

Jake: Bueno...

Verónica: Pasa algo Jake?

Jake: Nada mamá, espero que ya lleguemos pronto.
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Jake: Tío Héctor... ya te dije que no me gusta este juego... para... por favor....

Héctor: No hasta que se te quite lo maricon... y no mientas, sé que los disfrutas juguetito~

De repente vemos como un chico de cabello azul y piel pálida en un cuarto oscuro se despierta sobresaltado y lleno de sudor, se notaba que su cuerpo estaba temblando.

Jake: (Odio este tipo de sueños...) -Después se dirigió hacia al baño para mojarse la cara y al verse en el espejo sólo se dijo a si mismo- Niño juguete... odio ese apodo. -Luego volvió a su cuarto para intentar a volver a conciliar el sueño pero ¿a quién engaña? No podía dejar de pensar en ese recuerdo suyo que lo ha marcado hasta ese día.

El sol ya se estaba asomando por la ventana del chico, claramente no había podido dormir más después de aquella "pesadilla", Miriam como es de costumbre se levantaba a las 7:00 A.M., se supone que Jake también pues se había convertido como en su rutina pero esta vez no se levantó, le dolía demasiado la cabeza y se sentía débil, estuvo así por una hora hasta que Miriam entró a su habitación, obviamente se le hacía raro que su nieto no se haya levantado como es de costumbre.

Miriam: ¿Jake? ¿Estás despierto? -Dijo la anciana con un tono suave.

Jake: Mhm...

Miriam se le acercó y tocó su frente, estaba ardiendo, le tomó la temperatura y al chico peliazul le había dado fiebre, no estaba en condiciones para salir, menos para trabajar ese día.

Miriam: Jake... estás con fiebre.

Jake: No te preocupes Miriam... aún puedo hacer los quehaceres e ir a trabajar... estoy bien, lo juro -En el tono que lo decía no parecía muy convincente, obviamente Miriam no dejaría que su nieto se forzara a hacer cosas cuando claramente está enfermo.

Miriam: No Jake, hoy día te quedarás aquí descansando, yo me encargaré de todo, tú sólo descansa, no es necesario que vayas a trabajar.

Jake: Pero Miriam yo-

Miriam: Como tu jefa y abuela te digo que te quedes descansando hasta que te mejores.

Jake se sintió un poco feliz al escuchar que Miriam dijo que era su abuela, pero le generaba algo de impotencia y molestia el no poder hacer nada ese día, aunque no podía ir en contra de Miriam, así que le hizo caso.

Nuestro protagonista peliazul se encontraba en el baño vomitando, Miriam no se encontraba en ese momento en casa, había ido al mercado así que en ese momento fue que Jake aprovechó para sacar todo lo que tenía dentro, para él era una forma de desahogarse de todo, pues cuando empieza a pensar demás siente como su estómago se remueve sin parar terminando todo lo que estaba ahí en la taza del baño, Jake solo se decía que lo único buena que podría sacar de eso era que no engordaria tan rápido si lo sigue haciendo pero claramente no se sentía orgulloso de sacar todas sus penas que llevaba dentro de esa manera, muy dentro de él sabía que ni así se irían de su estúpida cabeza ingenua e inmadura - Qué asco...

Después de Todo (JakexTom)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora