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°Porristas°

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La subasta había iniciado bien, bueno, luego de que Cole subiera al escenario todo mejoró.

Savannah no puedo evitar bromear con el "Efecto Cole" durante media hora, llego un punto que Jackie la hecho del puesto de la subasta. Aburrida decidio buscar a Maia, al ser porrista su presencia era casi obligatorio en el evento.

- Soy Erin Collins - Se presento una chica medio rubia mientras caminaba cerca de los juegos.

- Savannah Howard - Sonrió de lado analizado a la porrista frente a ella. - ¿Necesitas algo?

- Con mis amigas vamos a recorrer el lugar, queríamos saber si querías acompañarnos - Sonrió dulcemente - También ira Maia.

Y sin pensarlo la rizada decidió ir, el resto se la tarde la paso riendo junto a Erin y dos porrista más, Olivia y Ruby.

También conoció la historia de Paige, Cole y Alex.

Esa misma tarde descubrió que le encantaba el drama Walter.

- Harán una fiesta más tarde, y como nos agradaste te invitaremos - Anuncio Erin divertida mirando a su nueva amiga, Savannah sonrió.

- ¿Donde será? Iré, pero primero tengo que ver con quien me devuelvo

- Carlos es nuestro conductor designado - Casi grita Maia, estaba emocionada con la idea de tener a Savannah en una fiesta.

Mientras que él chico era informado, las chicas seguían riendo, irían a la casa de Olivia y esta les prestaría ropa a Savannah y Maia, eran las que vivían más lejos.

- En el baño hay bolsos con maquillaje y cosas para el cabello, tienen el permiso de ocupar cualquier cosa - Dijo feliz la chica, le encanta pasar tiempo con Maia, y la rizada le estaba agradando.

- Me bañare en el primer piso - Informó Maia mientras tomaba un bolso de debajo de la cama de la chica y bajaba con una sonrisa.

- Ella, Ruby y Erin tienen bolsos con ropa y cosas necesarias para estas ocasiones - Explico amablemente - Espero tener uno tuyo pronto.

Ambas sonrieron, a Savannah le estaba encantando conversar con esas porristas. En New York había estado un tiempo en un campamento de porristas, cuatro meses completos antes de volver con sus estudios en Italia, le hubiera encantado unirse a principio de año.

- Muchas gracias por dejarme usar tu baño y prestarme ropa, Livi - Sonrió Savannah un poco más animada. No único que no le pudo prestar fue ropa interior, y agradecía el trauma que la hacía llevar ropa interior de cambio en su mochila.

- No te preocupes, para eso están las amigas, Savy - Ambas sonrieron antes de empezar a arreglarse, mientras charlaban y se maquillaban ponían al tanto a Savannah sobre la mayor parte de chisme del pueblo.

Se sentía en el paraíso.

- ¿Dylan te contó sobre sus problemas con Lee? - Pregunto muy bajo Ruby, como si fuera a decir algo prohibido. Mientas Savannah negaba confundida todas las chicas se sentaron a su alrededor.

- Todo comienza hace algunos años, cuando tenían 13, Lee tenía una novia llamada Stephanie, ella era la chica más linda de todo Silver Falls, y bueno, cayó en el encanto García. - Comenzó Maia

- Cayó tanto en el efecto García que empezó a coquetear con Dylan, y bueno, Dylan le siguió el juego - Seguio Ruby - se liaron durante tres meses, mientras que Lee no estaba enterado de nada.

 Eyes Don't Lie ¦ Lee GarcíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora