Después de que mis padres estaban buscando un psicólogo el cual les pareciera "bueno" para mí, habían pasado algunos días, incluso puedo decir que había pasado más de una semana desdé aquella plática, claro, los sueños no pararon en ese lapso de tiempo, incluso puedo decir que fueron de mal en peor aunque claramente yo no dormía para tratar de evitarlos, esto no era bueno en absoluto pero lograba calmarlos, hasta ahora ese método de no dormir estaba dando sus frutos, después del tercer día sin dormir caía completamente inconsciente y me despertaba al día siguiente, no me despertaba por el cansancio, mi cabeza era un desorden, las alucinaciones comenzaron más y más fuertes, la mala alimentación no ayudaba en nada. Todo sea por no tener más pesadillas.
Eran las 5 de la mañana, yo me encontraba despierta en mi habitación, estaba jugando algunos videojuegos pero la alarma de mi celular me hizo dejar de jugar para así pararme e irme a la ducha, me desvestí y entre, después de aproximadamente media hora acabe de ducharme, me puse la ropa y me senté frente al espejo para peinarme, mientras cepillaba el pelo con cuidado estaba mirándome a mi misma en el espejo miraba fijamente mis ojos y me encontraba perdida en mis pensamientos, por el rabillo del ojo notaba como sombras pasaban por detrás de mí, era producto de las alucinaciones por no dormir. La voz de mi hermano interrumpió mis pensamientos.
Basil: ¡T/N! ¡Hermana! ¿ya estás lista? ¡Papá ya nos está esperando en el coche!
T/N: Eh... ¡Ah! ¡Ya voy!
No me dio tiempo de hacer muchas cosas, solo tome mi mochila, mi gorro para el frío y salí con cuidado de mi habitación, abría la puerta y salía para encontrarme con mi hermano, el tomaba mi mochila y en su lugar me daba un sándwich.
T/N: Realmente no tengo hamb-
Mi hermano tomo el sándwich y lo puso directamente a mi boca sin que dejara de decir lo que le iba a decir.
Basil: ¡Shhh! ¡Traca y camina, vamos tarde!
Me tomo del brazo y corrimos escaleras abajo para llegar más rápido al auto, no me dio tiempo de ponerme el gorro así que lo traía en la otra mano. Al llegar al auto nos subimos lo más rápido que pudimos, nos miramos por un momento, los dos estábamos algo agotados por correr.
Basil: . . .
T/N: . . .
Los dos soltamos una pequeña risita, yo tenía el sándwich aún en la boca por lo que se me hacía algo difícil reírme.
El auto comenzó a avanzar. Yo comenzaba a comerme el sándwich que me había preparado mi hermano, mientras comía, miraba por la ventana apreciando la hermosa nieve callando del cielo, los grandes y robustos pinos al lado de la carretera, era bonito el paisaje y por un momento sentí tranquilidad.
Basil: Papá, es raro que hayas tomado este camino, casi nunca le damos por este lugar.
Padre: Lo sé Basil, vi en las noticias que había un choque por la carretera así que decidí ir por aquí. El camino es largo pero tranquilo.
Basil: ya veo... Entonces por eso vamos más temprano de lo habitual.
La conversación así había acabado, ahora comprendía el porque era más temprano de lo común y el porque de ir por este camino tan desolado.
Después de un par de minutos llegamos al instituto, le di un beso en la mejilla como despedida a mi padre y así salí del auto, camine unos pasos y me quedé para esperando a que mi hermano llegará, cuando llegó, se poso frente a mi y se agachó para estar a mi altura.
Basil: olvidaste el gorro en el auto.
Acomodo mi pelo y comenzó a ponerme el gorro, me quedaba quieta mientras hacia un pequeño moño en mi barbilla que era cuando estaba sujetandolo bien a mí, me miró por un momento a los ojos, en su mirada había algo de tristeza, supuse que era porque ya no nos íbamos a ver en todo el día pero no, el me dijo algo que me puso algo decaída en el momento.