Mi hermano le contó a mis padres lo que había sucedido y ellos le creyeron, trate de tar mi versión de los hechos, le dije que todo era un malentendido y que ella estaba fingiendo pero claramente no me creyeron, me regañaron y me castigaron de una manera algo exagerada, me quitaron en celular, me prohibieron ver la televisión entre otros castigos que hacen los típicos padres. Pero... Lo que más me dolía es que mi hermano le creyera a ella en vez de a mi, no lo culpó, después de todo el solo vio lo que yo hice y como le grite más no vio lo que ella hizo y me dijo, quizás solo debo dejarlo pasar y ya.
Los días pasaron y fueron muy malos, cuando estaba en la casa sentía mucha tensión por el hecho de que mis padres aún seguían molestos conmigo, me trataban algo mal y esto también incluye a mi hermano, también me trataba mal y en todo momento me recordaba lo que había hecho ese día y el como lo decepcione. Llegaba al instituto y las veces que me topaba con su novia y su grupo de amigas era bastante espantoso, me miraban y murmuraban, el rumor de que yo era una matona se hizo muy presente, ahora no solo Arlette (la novia de mi hermano) me decía cosas feas, ahora era toda la escuela. Trate de decirle a mi hermano la situación pero el no hizo absolutamente nada, me dijo que tenían razón. A esto también le sumamos el hecho de que no podía dormir, el insomnio y el estrés provocaban algunas alucinaciones (otra vez) las cuales me molestaban, una que otra vez escuchaba algunos murmullos en mi cabeza. ¡Todo era muy estresante!
El estrés que había acumulado en esos días era bastante grande, mis padres dejaron de llevarme al psicólogo porque decían que no le servía para nada y que ahora era peor que antes. ¿Que más podría hacer? Nada, simplemente estaba ahí, existiendo y guarandome todo para mí sola, era una carga muy grande para mí, no tenía un lugar donde yo pudiera estar bien o incluso cómoda, estaba llegando a mi límite.
Pasaron algunas semanas después de aquel incidente, llegó un punto en el que ya no pude más y fui donde mis padres para hablar sobre el tema.
T/N: Solo quiero un momento...
Madre: Que sea rápido.
T/N: Sé que ustedes siguen enojados conmigo pero... Solo quiero decir que yo no hice nad-
Madre: Ts Ts Ts Ts, Silencio, ya hemos hablado muchas veces de este tema, ¿Por qué no simplemente admites tu error?
T/N: Y-yo no debo admitir nada y es porque yo no hice nada...
A este punto mi voz ya se escuchaba entrecortada, quería llorar.
Padre: ¿Solo veniste para esto? Si es así, es mejor que te vayas, no queremos escucharte más.
T/N: n-no es así, yo...- — lágrimas comenzaron a salir— y-yo solo quiero decirles que n-no es verdad, que t-todo lo invento ella y que yo nunc-...
Madre: ¡Silencio! Vete a tu habitación ahora mismo.
T/N: l-lo... L-lo siento...
Aguante mis lágrimas lo más que pude pero era inevitable, me dolía el hecho de que mis padres no me creyeran, subí las escaleras para ir a mi habitación y mientras caminaba por los pasillos vi la puerta de la habitación de mi hermano entre abierta por lo que decidí hablar con él, entre y al momento en el que él me vio hizo una cara de disgusto.
Basil: ¿Que haces aquí? Se pide permiso antes de entrar.
T/N: Lo sé pero se que si te pedía permiso tu no me lo darías...
Basil: Ya, ¿Que quieres?
T/N: Solo quería disculparme por lo que viste aquella vez... Pero te juro que eso no fue así, y-yo no empecé tod-
Basil: No quiero escucharte más. No inventes excusas para lo que hiciste, estuvo muy mal.
T/N: n-no es lo que pareció, ella me empujó primero y me trat-
Basil se acerco a mi y me agarró del brazo y me arrastró hasta la puerta y me saco de su habitación.
Basil: dije que no quería escucharte.
Cerro la puerta justo en mi cara dejándome sola en el pasillo, en este momento ya había llegado a mi límite, ¿Por qué mi familia no me creé? ¿De verdad ellos ya no me quieren?
Camine a mi habitación y fui directamente a mi clóset, agarre una mochila y puse ahí solo una cambia de ropa junto a algunos pares de pantis, agarre algunos ahorros que tenía y igual los metí a mi mochila. Tome un abrigo y me lo puse, también tome mi gorro el cual me hacía sentir segura y así mismo salí de la habitación, camine hacia las escaleras y las baje, mientras bajaba vi como mis madres estaban viendo la televisión, no se daban cuenta de nada a su alrededor, camine hacia la puerta y salí de casa. Estaba anocheciendo y yo no tenía donde ir, tampoco me importaba mucho, solo quería salir de ahí y tener paz por un momento.
Camine y camine, no había muchos lugares donde ir, tenía hambre así que decidí ir a un puesto de comida callejera a comprar algo de comida, con la mida en mano fui al parque y me senté en una banca a comer. Estaba sola, tenía miedo y frío, no sabía que hacer, no sabía dónde ir y que sería de mí. Pasaron los segundos, pasaron las horas y yo seguía sentada, observando como los pinos se llenaban de la nieve que estaba callendonen ese momento, comencé a recordar todo lo sucedido por lo que las ganas de llorar se hicieron presentes y llore, llore como nunca lo había hecho, me estaba desahogando de todo, estaba sola a altas horas de la y el parque estaba completamente vacío, eso le daba más libertad para llorar. Después de unos momentos mis ojos se sentían cansados por lo que me acomode en la banca y cerré mis ojos intentando descansar, no sentí el frío en ese momento, no sentí nada.
Mientras dormía tuve una pesadilla pero lo curioso es que era distinta a las demás, está vez ahora estaba en un abismo oscuro, frente a mi se encontraba la silueta de aquel hombre el cual se acercaba cada vez más, está vez no puse resistencia alguna, simplemente deje que se acercara a mi. El hombre llegó frente a mi y no veía su rostro o su cuerpo en general, solo era una silueta color negro pero sus ojos rojos brillantes. Lo mire por unos momentos y de pronto empezó a hablar.
· · ·: ¿Estás lista para un nuevo futuro?
T/N: No lo sé... Tengo miedo...
· · ·: es normal tener miedo, después de todo aun eres muy joven.
T/N: ¿Que será de mí?
· · ·: Eso pronto lo sabrás...
Aquella silueta se agachó para estar a mi altura y acercó su mano a mi mejilla, sentí sus frías manos sobre mi, tenía miedo pero sentía que algo de mi quería creerle, quería dejarse llevar y así fue.
T/N: Entonces... Estoy lista...
· · ·: es una muy buena elección. Espero disfrutes de tu nueva vida, T/N.
Se paró y en un movimiento rápido se avalanzo sobre mi haciéndome sobresaltar y despertar de aquel sueño, lo primero al abrir mis ojos fue una persona, mis ojos no enfocaron bien ya que me venía despertando, parpadee un par de veces y por fin pude reconocerlo.
T/N: ¿S-señor Masacrik?