Madelaine vivió en el mundo muggle durante 17 años sin saber que una carta cambiaría absolutamente toda su vida haciendo que viaje a Londres a conocer a su verdadera familia.
Día nuevo, aprendizaje nuevo. Hoy era jueves y era la última clase que iba a tener con el profesor Snape porque luego venía el profesor Lupin.
Podría decir que Snape me cae bien, aunque tiene un poco cara de amargado pero a veces suele ser simpático conmigo, no con su cara obviamente pero si con hechos y palabras. Aprecio que dedique tiempo de su vida en enseñarle a una novata como yo.
Hoy me desperté a eso de las 8:00am, aproveche que el clima no estaba tan fresco ni hacía tanto frío y decidí salir a correr un poco por el campo que rodeaba la casa.
El poco aire fresco que sentía cuando corría era perfecto, necesitaba un poco de éste aire. El salir a correr hacía que mi cabeza se desvíe un poco de la realidad que estaba viviendo y me hacía dejar de pensar en todo lo que estuvo pasando éste último mes.
A veces se me escapaban lágrimas por todo lo que había vivido allá en Argentina, la amargura había vuelto a mi garganta y ese nudo que se había ido volvió a aparecer haciendo que comience a llorar de frustración y enojo. Odio y bronca, quería desquitarme con algo pero yo no era así.
No soy partidaria de la violencia pero a veces el estrés, la angustia y muchos sentimientos más hacen que quieras desquitarte con algo.
Volví a la casa de los abuelos a las 9:30am, me metí en la ducha para luego desayunar un café con leche bien caliente con un poco de brownie que había hecho la abuela ayer por la tarde.
Hoy tenía la última clase con el profesor Snape, así que bajé al living para dejar los libros de repaso y fui por el café y el brownie y volví para comenzar a leer los libros.
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Narrador Omnisciente:
Se acercaba la hora del almuerzo y la Sra. Hester decidió hacer unas pastas caseras con ayuda de Lukoil, no quiso molestar a su nieta que estaba estudiando.
Hester no se lo había dicho, pero estaba orgullosa del avance que estaba teniendo, pero había algo por dentro que la preocupaba... contarle a su nieta la otra parte de la historia de su familia.
Sus padres todavía no habían aparecido, y quería decirle a su nieta sobre quiénes eran la familia por parte de su madre, pero le daba temor, no sabía como decírselo.
-¿La Ama Hester se encuentra bien?-. Le preguntó Lukoil a Hester. -Lukoil, estaba pensado en cómo decirle a Anastasia la otra parte de su historia, ya sabes, la familia de su madre son magos y también vampiros-. Dijo lo más bajo que pudo para que su nieta no escuchase la conversación.
-Lukoil sabe algo Ama, no todo pero sabe. Hace mucho Lukoil escucho al Amo Gellert hablar sobre el tema cuando vivía en la casa de la Ama, pero Lukoil decidió no entrometerse-. Dijo el elfo contándole a Hester.
