El niño con el pijama de rayas - película ✔️

• Capitulo 12 •

Bruno se columpiaba en su columpio de neumático el cual construyó con unas cuerdas y el neumático que había pedido unos minutos antes.

Ahora ese sería su lugar para distraerse en lugar de jugar juegos de mesa solo adentro de su habitación.

Al percatarse de una gran nube negra quiso pararse sobre el columpio para observar mejor que era o de donde provenía pero resbaló y cayó al suelo donde habían piedras.

Vio a alguien dirigirse corriendo hacia el y lo miro preocupado.

Lo cargo y lo llevo adentro,a la cocina donde lo sentó en la barra y comenzó a vendar su herida el cual se hizo en la rodilla derecha, Bruno,con lo curioso que es,se mantuvo observando a aquel anciano del pijama.

—¿Y mi mamá?— preguntó Bruno al hombre mayor mientras veía como lo vendaba.

—Salio— contesto.

—¿Cuando va a volver?— le pregunto nuevamente.

—Yo creo que pronto— el anciano lo miro. —Pero no te asustes—

—Pero me voy a desangrar— reprochó con angustia.

—Claro que no— dijo para después tomar unas tijeras y hacer un corte en medio para poder amarrar el vendaje.

—Tengo que ir al hospital—

—No— amarro el vendaje al rededor de la rodilla del pequeño. —Es una pequeña herida,tranquilo— apretó un poco la venda haciendo que el pequeño hiciera una mueca de dolor. —Tranquilo,no está tan mal— termino de amarrarlo. —Listo,no paso nada— tomo el botiquín y lo cerró para después guardarlo en la lacena nuevamente.

—¿Cuál es su nombre?— le pregunto el pequeño curioso.

—Pabel— miro al niño mientras cojeaba hacia el banco que se encontraba frente a él para después sentarse y comenzar a pelar las papas. —Ahora quédate allí por unos minutos,antes de apoyar esa pierna,¿Entendido?—

—¿Le dirá a mamá lo que pasó?—

—Creo que se va a dar cuenta ella misma—

—Tal vez me lleve con un doctor— insistió.

—No lo creo— dijo con sinceridad mientras continuaba pelando papas.

—Tal vez sea una herida seria— miro su pierna vendada.

—No lo es— volvió a decir Pabel.

—¿Cómo lo sabe?— vio a Pabel mientras veía como pelaba la papa con un pequeño cuchillo. —Usted no es doctor—

Pabel,al escuchar eso,dejó de pelar la papa y miro al suelo con tristeza,recordando lo que hacía antes de que lo llevarán a ese horrible lugar.

—Lo soy— hablo con tristeza.

—No es cierto,solo pela papas señor— miro al hombre quien trataba de contener sus lágrimas.

—Practique la medicina antes de…— estuvo sus palabras al darse cuenta de que el pequeño niño no es consiente de lo que pasaba en aquel lugar. —De que me…Venir aqui— dijo finalmente aguantando sus lágrimas.

—Usted no era un buen doctor si debía practicar— le sonrió al ver cómo el sonreía,el hombre lo miro con lágrimas en sus ojos tratando de que no salieran con una pequeña sonrisa.

—Ahora,cuando crezcas,¿Que vas a hacer?,dime— le pregunto quién Bruno se puso a pensar en que sería bueno. —Ya se,un explorador—

—¿Quién le dijo eso?— lo miro extrañado,¿Cómo sabe eso de el?, Pabel solo sonrió y dirigió su mirada a la papa. —¿Le gusta donde vive?— esas palabras hicieron borrar su sonrisa.

Escucharon unos pasos acercarse a la cocina,ambos voltearon y vieron a la mamá del pequeño quien alarmada de ver a su pequeño lastimado entro apurada dejando las flores que sostenía, Pabel agachó su mirada pensado que lo iban a golpear o algo por el estilo si pensaban que el le hizo daño.

—Bruno,Bruno— hablo apurada mientras dejaba las flores aún lado de su hijo. —¿Que te paso?— observo la venda de su rodilla.

—Hice una columpio,de pronto caí y me corté la rodilla,pero Pabel salió,me cargo y me puso un vendaje— la mujer sorprendida miro al hombre quien mantenía su mirada agachada.

—Ve a tu alcoba— tomo a Bruno y lo bajo.

—Pero Pabel dijo que tenía que…— su madre lo interrumpió.

—No discutas,ve a tu alcoba— Bruno hizo caso y salió de la cocina.

Su madre comenzó a sacar las compras y miro al hombre sentado en la banca.

—Gracias— le susurro para después tomar el ramo y su bolso para salir de la cocina.

Ya casi viene el encuentro de nuestros dos protagonistas.

:D