• Capitulo 23 •

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Decidió bajar,y en una de las escaleras que daban enfrente del despacho de su padre,se sentó en una para abrochar su zapatos,pero la vista frente a él,llamo su atención.

Personas metiendo proyectores al despacho de su padre,de esos de aquella época, como de 1940 por ahí.

Solo hecho un último vistazo y camino del lado contrario a la puerta de salida,pasando por la cocina donde pudo ver a aquella personita que había conocido y ahora era su amigo, lo miro sorprendido y Shmuel al verlo le sonrió.

Bruno sonrió con alegría y se acercó a él con una enorme sonrisa de felicidad.

—¿Que estás haciendo aquí?— le pregunto al pequeño del supuesto pijama.

—Querian que alguien con dedos pequeños aseara esto— dijo alzando la copa que se encontraba limpiando con un trapo.

Shmuel,se encontraba frente a una mesa con vasos muy estrechos como para que una persona adulta los limpiara,limpiando cada uno de ellos,y hasta el final de aquella mesa, habían algunos postres.

Bruno se quedó callado un momento,pensando en todo lo que le habían dicho,mientras Shmuel lo miro y después a aquellos postres deseando uno.

—Se supone que no debemos ser amigos,Shmuel— hablo finalmente con tristeza. —Debemos ser enemigos,¿Lo sabías?— el pequeño lo miro confundido,mientras limpiaba aquellas copas.

Pero,no contesto nada,¿Que debería decirle?,Claro,somos enemigos,dejemos de ser amigos y peleemos,claro que eso no,Shmuel quiere seguir siendo amigo de Bruno y viceversa,pero al parecer,nadie se puede enterar de esto.

Bruno al mirar de nuevo a Shmuel,pudo ver qué con su mirada señalaba a aquellos postres, deseando alguno,haci que al darse cuenta,hablo.

—¿Quieres uno?—

Shmuel asintió,Bruno, inmediatamente tomo dos de aquellos postres,de los más grandes y se acercó a Shmuel a entregárselo quien rápidamente lo tomo y le dio un mordisco desesperado,haciendo reír a Bruno.

—¿Tu padre es gentil?— le pregunto a Shmuel.

—¿Gentil?— cuestiono con la boca llena  el pequeño al no saber el significado de esa palabra.

—Que si es bueno— cambio sus palabras para que él entendiera .

—Mj— asintió.

—¿Has pensado que no lo sea?— hizo otra pregunta Bruno el cual Shmuel negó. —¿Te enorgullece?— el pequeño asintió y trago el pedazo de pan que tenía en la boca.

—¿Tu también del tuyo?— pregunto,Bruno se mantuvo callado,pues ya no sabía que pensar de su padre,si lo era o no.

—Oye,y ¿la finca es horrenda?— cambio el tema pero el sonido de una puerta ser abierta bruscamente los asusto,más al pequeño Shmuel.

—¡Cómo te atreves a hablar con la gente de esta casa!— hablo el soldado,con nombre de Courtler,mientras se ponía frente a él con aquella mirada intimidante. —Que descaro— miro las manos del pequeño viendo el pan que comía el cual Bruno le había dado. —¿Estás comiendo judío?,¿Te robaste esa comida?— susurro con voz muy seria y enojada. —¡Contéstame!— grito furioso.

—No señor,el me dio de comer— miro a Bruno quien se mantenía callado mirando la escena sin entender. —Es mi amigo—

—¿Que?— dijo el teniente,y miro al otro pequeño. —Jovencito,¿Conoces al judío?— cambio su tono de voz,pero al no contestar Bruno,se despero. —¡Conoces al judío!— grito asustando lo haciéndolo negar.

—¡No!,cuando entre el se estaba comiendo el pan— con ganas de llorar. —Jamas lo había visto,en verdad— Shmuel lo miró desilusionado,¿En serio era su amigo?.

—Tu,termina lo que estás haciendo— miro a Shmuel. —Cuando vuelva,vamos a discutir que le pasa a las ratas ladronas— tomo a Bruno por el hombro. —Sigueme— le indico para sacarlo de ahí mientras mantenía la cabeza agachada.

El niño con el pijama de rayas - película ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora