Gretel leía el periódico que el joven la había dado.
Mientras Bruno estaba arriba de una silla observando la ventana de la alcoba de su hermana ya que la de el está con madera evitando que vea la vista.
—No es justo que tú tengas está vista— reprochó mientras miraba la ventana.
—No vamos a cambiar—
Escucho una campana haciendo que volteara a ver hacia la reja por donde entran y salen,logrando ver a un hombre algo mayor en una bicicleta.
—Creo que ya llegó la escuela— observo como le abrían la reja dejándolo pasar.
. . .
—Me refiero a la historia presente— hablo el hombre mayor.
Los tres se encontraban sentados en la mesa del comedor,con algunos libros y hojas enfrente de ellos.
—¿Les interesa lo que sucede en nuestro país?— miro a ambos niños.
—Si,mucho— hablo su hermana rápidamente con entusiasmo.
—¿Y estás bien enterada de la…situación que nuestra grandiosa nación enfrenta?—
—Si,siempre que puedo,leo el periódico— comenzó a recordar a aquel joven soldado. —Y uno de los hombres de mi padre me mantiene informada de lo que pasa— sonrió.
—Bien,¿Y tú Bruno?— dirigió su vista al menor. —¿Tu lees el periódico?— el negó. —Al menos,¿Has leído libros?—
—Muchos—
—Grandioso,¿Que clase de libros?—
—De aventuras más que nada— miro al mayor. —Ya sabe,caballeros de brillante armadura explorando tierras extrañas y tontas princesas que solo estorban— miro a su hermana con una sonrisa de burla.
—Ah,es por eso que he venido a ayudar,¿Que edad tienes ya,Bruno?,¿Ocho?— el pequeño asintió. —Es hora de sacar la nariz de los libros de ficcion— el pequeño lo miro molesto. —Y aprender los hechos,el tiempo ideal— saco un libro de su portafolio marrón. —Para traer tu mente al mundo,y me parece que este es un buen comienzo— era un gran libro que ambos niños miraron.
Al parecer,Bruno tenía que leer ese libro y dejar los demás libros de ficción para aprender de la historia presente y de la realidad.
Haci que,se encontraba leyendo ese enorme libro se tardó en su columpio,mientras atrás de el,pasaban dos enormes carros donde transportaban a las personas a aquella finca.
Pero el no se percató de esto,pues se mantenía concentrado leyendo aquel enorme libro de historia aburrida.
Cerro aquel libro aburrido y observo que aquella puerta que dirigía al patio trasero estaba abierta.
Publicaré este y otro capítulo más,para saltarnos a lo emocionante y no hacerlos esperar.
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El niño con el pijama de rayas - película ✔️
Historical Fiction"La niñez se mide atraves de sonidos,olores y observaciones, antes de que aparezca la sombra oscura de la razón". - John Bejeman. "-Que pena que olvidaste el chocolate- miro al suelo con tristeza. -Lo se, p...
