𝗢𝗡𝗘 𝗦𝗛𝗢𝗧𝗦 ↻ gilbert blythe © [+18]

22.- 𝗗𝗥𝗘𝗔𝗠

Él nunca se imaginó que estaría haciendo algo malo en estos momentos, es decir, siempre tuvo prese lo hermosa que eres, pero nunca pensó que la atracción que sentía por ti llegaría tan lejos. Nadie que sepa cómo es Gilbert creería que, si le dijeran que el chico tiene una mente sucia, tan caballeroso e inteligente que es, Gilbert es el chico perfecto, pero entonces llegas tú, te metes en sus pensamientos y sueños y el chico ya no sabe con qué calmar sus erecciones cada vez que soñaba contigo arriba de él y sin nada de ropa. Siempre despertaba sudoroso y agitado, junto con un gran problema en sus pantalones de dormir.

Había probado bañándose con agua fría, pensar en cosas aleatorias y salir a dar un paseo nocturno, pero después de tanto hacerlo, llegó a un punto en que no te podía dejar de pensar, así que tenía que aguantarse a que su polla volviera ponerse flácida y que el sueño lo volviera a llamar. Pero hoy había sido su límite. Soñó que iba al lago de aguas relucientes que había en el pueblo, llevaba consigo unas cubetas para recolectar agua y de un momento a otro escucha una voz celestial cantar, la curiosidad mató al gato y se acercó más a la orilla para poder buscar de dónde provenía ese canto; lo que encontró lo sorprendió mucho, una chica de larga cabellera color dorado estaba frente a sus ojos desnuda, era obvio que la chica estaba dándose un baño por como masajeaba su cuero cabelludo.

Gilbert no pudo evitar recorrer su cuerpo de espaldas con su vista, se impresionó con las hermosas curvas de su cintura y se mordió el labio inferior cuando bajó la vista a su trasero, inconscientemente, dejó caer las cubetas haciendo que la chica diera un brinco del susto y volteara para atrás, sus ojos parecieron salirse de órbita cuando se dio cuenta que la chica eras tú, por alguna razón, tú no hiciste nada para cubrirte, no gritaste ni dijiste algo para que se fuera de ahí, en cambio, te volteaste por completo enseñándole tu hermosa desnudez, sus ojos se enfocaron en tus enormes pechos y una molestia comenzó a surgir entre sus pantalones, sonreíste pícaramente.

—¿Te quedarás ahí parado observando o vas entrar conmigo? —preguntaste, Gilbert sentía que sus piernas no le respondían, su mente estaba en blanco y de su boca no salía ni un sonido, vio como comenzaste a caminar hacia él. Una vez ambos frente a frente, sintió como su respiración comenzaba a fallar, sintió desfallecer cuando una de tus manos se colocó en su nuca y la otra bajó hacia su entrepierna acariciando su bulto, tus hermosas tetas se presionaron en su pecho, sus narices rozan y sus alientos chocan, sintió como lo acercabas a él y unías sus labios con los tuyos, colocó sus manos en tu cintura desnuda acercándote más a él, gemiste entre sus labios cuando sentiste sus dedos hundirse en tu piel y luego...

...Despertó...

Se sentía agitado y sudoroso, levantó la sábana que cubría su cintura para abajo y notó la gran erección que ese sueño le había provocado, no lo pensó dos veces y decidió que esta vez no negaría su placer, así que se bajó los pantalones y después su ropa interior liberando su polla que ya goteaba líquido preseminal, su mano se deslizó por todo su falo y un gemido se escapó de su garganta, cerró los ojos imaginando que eras tú quien lo masturbaba, imaginó como metías su pene a tu boca y tus manos te ayudaban en lo que no alcanzabas. En su mente, tú estabas desnuda y ahora eran tus pechos los que acariciaban su miembro, imaginaba lo suave que se sentirían, luego creó otro escenario donde tú lo estabas montando, tus tetas rebotaban en su cara y él tenía sus manos agarrando tu trasero ayudándote a saltar, imaginaba tus gemidos y tus caras de placer y como tu pequeño coño se contraía con cada embestida.

Ahora tú estabas en cuatro y él te daba por atrás, imaginaba como tu trasero rebotaba contra sus caderas y como su polla entraba y salía en tu coño, tomaba tu cabello y lo jalaba dando más fuertes sus embestidas. Otra imagen pasó por su mente y en esta él estaba comiéndote el coño, pasaba su lengua por tus pliegues probando tu sabor, enredabas tus dedos en su cabello ruloso y jalabas de ellos cada que gemías fuertemente. Sintió su orgasmo acercarse, así que bajó su mano hacia sus bolas intentando detener su clímax, por su mente pasaban imágenes tuyas sacadas de sus sueños, gemías y jadeabas, tu cabello alborotado y tu cuerpo lleno de marcas hechas por él.

Volvió a imaginarte, pero ahora tú debajo de él mientras te follaba, tenía una mano que tomaba tu cintura y otra sujetaba tu pierna que descansaba en su hombro, tus tetas rebotaban en cada estocada y tu espalda se arqueaba. Su mano subía y bajaba por su falo, imaginando que empujaban sus caderas contra ti, sentía su orgasmo cerca, aceleró sus movimientos en su polla y con un fuerte gemido se corrió, su semen cayó en sus muslos y en su mano, echó su cabeza para atrás cerrando los ojos, imaginando que en donde cayó su semen fue en tu abdomen salpicando tus senos y rostro, soltó un suspiro.

―Joder... —murmuró, se levantó y fue en busca de una toalla para poder limpiar el desastre que había hecho, volvió a acostarse en su cama después de cambiar las sábanas, el día siguiente sería día de lavado y él se encargaría de lo suyo. El sueño volvió a llamarlo y lo que restó de la noche durmió muy tranquilamente.

Pensó que si no podía tener como él quería, tal vez lo haría realidad en sus sueños.

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05/02/2024

Este one shot fue anteriormente publicado en 2022.