Snow Flower | Taekook ° Kooktae

4: One I've Been Missing

A la mañana siguiente Jungkook estaba con el cuerpo helado y rígido, por fin era de mañana y no debía de volver a taparse con las mantas para olvidar el frio que le estaba consumiendo.

Se tallo los ojos para despertar, solo para encontrarse un rostro frio paseando por la habitación, rodeados por un silencio incomodo, al que solo respondió apartando la mirada, se levantó para recoger sus mantas, se cruzó más de una vez caminando la habitación al otro. Ignorar era aquello que hacia Taehyung, y sin duda era algo que sabía que se le daba bien. Demasiado bien. Ya que cada vez que se topaban en el camino ni siquiera se dignaba a mirarlo, se sintió invisible. Pero Jungkook no era valiente para enfrentarlo, lo intento anoche y no estaba listo para otro golpe improvisado.

Taehyung comenzó a subir las escaleras.

—Hey que tampoco me tienes que tratar así— grito Jungkook desde abajo recibiendo solo como respuesta un azotón de la puerta.

Jungkook soltó un resoplido, se quedó un rato sentando en una de los escalones, esperando a que su teléfono encendiera, sus alarmas se encendieron cuando vio las veinte llamadas perdida y los cincuenta mensajes de Seokjin. La noche anterior con todo lo que había pasado ni siquiera lo habría recordado.

Apareció el nombre de "Jin cinco" en la pantalla.

—¿Jungkook?, por dios dime que eres tú, llevo llamándote todo el día.

—Soy yo Hyung, perdón por no llamar antes, lo olvide.

—Dime, ¿Cómo te fue...

—Anoche

«Maldita sea»

—...Con tu familia?

«Maldición, maldición, maldición»

—Bien, supongo. Un reencuentro emotivo.

Y al inicio lo fue, abrazar a su madre por primera vez ver a su hermano, por supuesto que hubiera sido perfecta, ahora tal vez había cambiado un poco, no esperaba encontrarse a su ex novio en la casa de sus padres, usando la habitación que era de el, sentándose al lado de su madre donde él siempre había estado, riendo junto a su hermano contando cosas estúpidas que ellos solían hacer en un inicio, tampoco se había sentido tan reemplazado.

Ahora con la luz del sol, sí que estaba furioso.

Jungkook sintió que él debía de ser el que ignorara al otro, el que le hiciera saber que era invisible, no al revés. Pero no se sintió capaz de hablar de eso con Jin.

—Bien, solo eso.

—Si solo eso, todo bien.

—No puede salir todo bien— gruño el otro—. Ósea si puede, pero debió de pasar algo más, se alegraron, me hubiese encantado acompañarte. Me contaras cuando regreses, hazme saber si necesitas algo...

—Lo hare Jin., no debes de preocuparte, estaré bien.

—Bien, te llamare por la noche. Y esta vez responde, que cada vez que no lo haces me imagino que estas en un lugar con las manos atadas.

—Tranquilo hyung, hablemos después.

Colgó la llamada luego tomo una chamarra antes de subir arriba, el frio lo estaba atormentando. Por supuesto que el clima de Corea en invierno no era algo que extrañara.

—No, ¿Por qué? — escuchó un leve grito de su madre que le hizo retroceder y volver a cerrar la puerta.

—Lo siento...

—Tae cariño, siempre pasamos juntos navidades, no puedes irte ahora ¿con quién pasaras las festividades?, ¿además quien será mi acompañante en la cena de Navidad?