Deseo Irresistible (#PGP2024)

Capítulo 6: Los imbéciles también tienen buenas respuestas.

MALÚ:

Han pasado cinco días desde el desastroso encuentro con Lukas en la universidad, y a juzgar por como van pintando los hechos no creo que pueda suceder nada más, aunque no bajaré la guardia demasiado rápido los chicos como Lukas no se rinden tan fácilmente.

Estos días han sido un poco tediosos entre exámenes y proyectos universitarios, a veces me arrepiento de haber escogido mi profesión sin embargo Francia siempre me recuerda que no puedo mantener la boca cerrada y que da por seguro que me convertiré en una excelente periodista.

Por decimoquinta vez esta noche vuelvo a pararme delante del espejo contrariada. Mi cabello negro cae sobre mi espalda llegando hasta la mitad de la misma, mis ojos negros me devuelven la mirada cargada de muchos sentimientos. Mi yo racional me dice que es una mala idea salir a esa fiesta hoy en la noche, que debería quedarme acostada en mi camita, tranquila sin preocupaciones, pero la otra Malú, esa que es prepotente, no se calla y es una total fiera cuando se meten con su familia, la que es vulgar en ocaciones y bebe hasta por los codos me pide que termine de arreglarme y vaya a disfrutar de la maldita noche junto a mis amigos.

-¿Aún no te has arregldo? -Francia enta por la puerta con una toalla sobre el cabello. Sus ojos azules me observan interrogatorios y niego rebuscando en mi estuche de maquillaje -Bueno sabes que Jean no demora en venir.

-Jean no entiende que las muejres necesitan tiempo para maquillarse, aunque es entendible el rubio solo posee par de neuronas -comento despreocupadas haciendo a Francia soltar una carcajada.

Me levanto de la silla frente al espejo para acabar de escoger un atuendo adecuado para la fiesta. Mis ojos se pasan por cada prenda de vestir desde jeans rasgados hasta vestidos de modelos y colores diferentes. Termino escogiendo un vestido azul que nunca he estrenado y salgo del cuarto para ponérmelo en el baño.

Al terminar de cambiarme sonrío complacida por el resultado así qur aplico un poco de gloss en mis labios y aliso las puntas de mi cabello, abandono la habitación al mismo tiempo que Francia abandona mi dormitorio.

-A veces me pregunto porque Dios no me otorgó tu hermosa figura amiga mía -dramatiza secandose una lágrima falsa haciendome reír.

Bajamos las escaleras charlando sobre el nuevo producto de cosméticos lanzados en el centro comercial. A veces Francia me hace recordar a Gia, ambas son filosas con sus palabras y te hacen reaccionar cuando estás cometiendo una putada, sin embargo Francia no es ella, porque estoy segura que no sería capaz de dañar a quienes ama por benefecio propio.

No puedo evitar arquear una ceja al encontrar a Jean recostado al auta como si estuviese posando para alguna revista de moda masculina. Lleva una camisa del mismo tono que mi vestido y unos vaqueros oscuros que hacen que luzca atrayente y magnético, con cada paso que nos acercamos logramos llamar su atención y veo como sonríe al notar que vamos combinados.

-No sabía que estaríamos vestidos iguales Malú bebé -canturrea juguetón haciendo bufar a Francia por lo bajo, fingiendo que me ha ofendido su apodo le golpeo el hombro con fuerza provocando que se masajee la zona con sus brazos -No seas demasiado agresiva -farfulla subiendo al coche.

Rodeo el auto para sentarme en los asiemtos traseros junto a Francia antes de comentar:

-No seas tú tan imbecil.

Me paso todo el camino pérdida en mis pensamientos y lo extraño que se siente estar saliendo de fiesta después de tanto tiempo, y me refiero a este tipo de planes, de salir a una fiesta universitaria, bailar y beber cerveza gratis, conocer algún chico guapo y enrrollarme, a volver a ser la María Lucía de hace un año.