Lentes empañados

Capitulo 12: ¿Que hago con mi vida?

“A veces me olvido que te escribo y no te describo, es una gran diferencia que a veces se desvanece de mi conciencia.
Te hago escritos describiendo lo que me haces sentir, más no sé nada de que te gusta o que piensas sobre mí. Elaboro versos, rimas, escritos completos, enormes parapetos desde la ilusoria verdad irreal que se crean mis emociones, que sin razones mediáticas entre corazón y mente escribo que te quiero y que por ti estoy demente, pero realmente... no sé quién eres y aun así no sales de mi mente.

Que puedo esperar de ti si no se una pizca de la historia de tu vida, una vida que se que existe por que pongo en duda mi cordura ante la absurda situación en la me pones, te vuelves la razón de mis desvelos, la inspiración a las 2:30 am escribiendo sobre algo que no entiendo, de un sentir que no tiene explicación, de la salida de una habitación,  que ni siquiera tiene puerta de entrada, solo apareciste atrapada en las paredes de mi corazón.

Y ahora escribo con esa masa palpitante que esta aprisionando a alguien que no conoce, no le ve, no le siente, por que si quiera sabe si esa persona le tiene presente, chorreando sangre por doquier, usándole como tinta para hacer un retrato en letras, de esa persona que quiere conocer.

Por qué al fin y al cabo paso escribiéndote, más no puedo describirte, por que para eso primero tendrías que dejarme abrir ese libro de oportunidad, que tiene la portada más brillante con sombras que resaltan su esplendor, la cual te recuerda que para medir la luz debemos tomar en cuenta la oscuridad, y la verdad, muero por conocer la literatura pesada de tu pensar, para emplear cada conexión de mi sistema nervioso, en función de que el tuyo me dé una pizca de información, de lo hermoso y enigmático de tu ser, entonces por fin poder no solo inspirarme a escribirte, si no también plasmarte y hasta en mis escritos, poderte ver.

EBM.”

Me encontraba navegando en mi computadora, escuchando música y quizá también queriendo escapar de la plática con Rayel sobre lo ocurrido en nuestra pasada cita, habían pasado dos días desde entonces, leí aquel escrito que describía medianamente mi situación actual,  era un anuncio de una plataforma que se me hizo conocida “Wattpad” ¿dónde había escuchado ese nombre?
Mi mente respondió rápido “Rayel”- hasta en la sopa me la encuentro, pensé, aunque siendo honesto siempre estoy pensando en ella.

Luego de mi estado reflexivo sobre mi primer beso y otros temas profundos, decidí descargar aquella aplicación, según la historia de la montaña de ropa es una plataforma de lectura y escritura, cree un perfil, pude notar que en los perfiles de los escritores, podías ver sus listas de lectura, y recordé “ojala nunca lea mi diario o vea mi biblioteca en Wattpad.”

Busque por su nombre pero habían demasiados perfiles, hasta que busqué su apellido y lo encontré “Osmond05-12-14” supe que era su perfil por la fecha en su usuario, la fecha en la que madre falleció.
Husmeé un momento en su perfil, su foto de perfil eran unos tulipanes morados, su Nickname era “Osmond M” y me llevé una sorpresa cuando su lista de lectura estaba lleno de dramas adolescentes, libros de un género nuevo para mí llamado “BL”, sus siglas significaban “boys´ love” un género dirigido a mujeres que disfrutan del romance entre dos hombres, era solo un libro de ese estilo en su lista, pero me perturbó lo suficiente como para no husmear más.

Pude notar que habían también unas cuantas historias de su autoría, pero uno en especial me llamo la atención, su perfil es antiguo del 2015, había un libro llamado “Mi diario personal”. El libro no estaba terminado, la aplicación decía “obra en proceso” se trataba de una forma de desahogarse, no quise ser entrometido así que lo ignore, no me gustaría que nadie se entrometa en las cosas escritas en mis libretas.

Pude notar que seguía nada más a tres autores, que de las coincidencias más extrañas que he tenido, sorprendentemente uno de los perfiles que seguía era el mismo del escrito que me llevó a entrar a esta plataforma, “EBM05” sus escritos se me hicieron interesantes, había uno en especial “Susurros de un corazón que ya no late” este libro contenía escritos de su autoría, en éste se encuentra el del anuncio que captó mi atención, seguí leyendo y hubo uno que simplemente me maravilló…

“No me gustan los abrazos, es más simple en realidad, no me gusta el contacto, el calor, el sentir o estar acompañado, ¿será que me siento solo o abandonado? Pero... cada vez que pienso en ella todo eso se vuelve una estupidez, una mentira de un tonto anticuado.

No te conozco, no te comprendo y ni siquiera sé si podría agradarte, sin embargo no sé cómo terminaste abrazándome y con solo ese gesto me desarmaste, sentí un gran calor no en mi cuerpo precisamente, aunque seguro mi cara estaba caliente, roja o pálida no estoy seguro, pero sentí ese tacto cálido y hermoso, viniendo de ti, una contacto que traspasó mi pecho hasta alcanzar mi corazón al fin destrozando cada barrera que puse destruyendo mis muros.

Me faltó el aire, las palabras, pero no la emoción, quiero poder verte, que sonrías, que te acerques y poder sentir ese calor extraño que no comprendo, ese sentimiento de ser fuerte y débil, esa calidez que no puedo tener de nadie más.

Pero que importa lo que no puedo comprender si al final no sé si piensas igual o solo fue para ti un abrazo más un tonto gesto de amabilidad.

Ahora me encuentro escribiendo a una completa extraña, nadie me había hecho escribir en un buen tiempo, por eso quiero comprender ¿quién eres? ¿Que eres? ¿Qué tienes? ¿Por qué tu calor no me daña? Haces que mi corazón deje de estar ausente y apagado, lograste recordarme que no estoy muerto que solo estoy infinitamente roto, y aun que es exagerado o simplemente tonto, terminaste por recordarme que estoy vivo, con un abrazo, maldita ironía, captaste mi atención con tu calor con un abrazo ese contacto odio y admito que no tengo una explicación, me vuelvo loco y tú eres la razón.

EBM…”

Fue como leer mi propia libreta, este escrito era algo antiguo, eran muchos sin embargo este, fue un golpe en el estómago, este perfil me hizo crearme una cuenta para encontrar más escritores como este, y quizá contar mi historia, o solo usarlo como diario.
Luego de crear mi cuenta cree mi usuario “Dankworth26” aunque no me gustan mis apellidos era más sencillo que batallar por un user que no esté ya seleccionado, y el 26 por que además de ser mi fecha de cumpleaños “maldito 26 de abril” pensé, también eran dos dígitos que sumados formaban mi número favorito, el ocho es un número par para mi genera buena suerte.

“Miércoles 8 de diciembre de 2021, Pase el día y gran parte de la noche entera leyendo los escritos de “EBM05” hasta que antes de ir a dormir decidí seguirle para seguir informado de sus escritos, que asco sueno como un sucio fanático obsesivo, honestamente me hace sentir más seguro de mis notas oscuras en mi libreta, me hace pensar que son más que una medida terapéutica, espero leer más de ella mañana.”

Era jueves por la mañana tenia cita con Harris temprano, según el para mejorar mis hábitos debo levantarme algo más temprano aun que sean vacaciones.
Ya era un mal día cuando llego un mensaje de Edith.

-Deja de husmear en mis cosas, imbécil.- No sé de dónde venía ese mal genio, y honestamente el mío tampoco es el mejor menos un jueves en vacaciones por la mañana.

-Buenos días, ¿es Halloween? O ¿Por qué te comportas como una bruja?-

-Perdón ¿Dónde están mis modales? ¿Cómo estas maldito cretino?- seguimos así un buen rato hasta que me anime a preguntar.

-¿Qué diablos te pasa? sé que eres una perra, pero ¿que hice para recibir tu rabia?- Entre molesto y curioso espere su mensaje el cual llego con una captura algo inesperada. 

Se trataba de una captura de pantalla en su barra de notificaciones, mostraba un logo de una W naranja seguido de un “Dankworth26 empezó a seguirte” seguido de varias alertas de estas mismas que decían “Dankworth26  voto en tu historia…”

-¿Se te refresca la maldita memoria? o ¿aún no entiendes por qué estoy molesta?- No comprendí de inmediato hasta que note una alerta en m barra de notificaciones. Se trataba de la aplicación Wattpad, fue entonces que caí en cuenta de lo que sucedía.

-Yo… no sé si realmente entienda.- le respondí con dudas.

-¡AHG!-¡VEN A MI CASA JUSTO AHORA!- Fue su último mensaje, estaba algo molesto y asustado, no me gustaba que me hablasen así, fui rápidamente ya que luego tendría que ir con Harris, llegué y ella se encontraba en el pórtico de su casa sentada esperando con cara de melancolía más que de enojo, algo que no esperaba después de nuestra conversación.

Me estacioné y ella se levantó, tenía puesta un estilo de pijama negra con pantuflas rosas, me pareció irónico, ella no dijo ni una palabra solo me hizo una seña con su mano para que entrara, luego de ello se sentó en el sofá rojo de su sala y se quedó en silencio.

Traté de liberar tensión con un chiste de mal gusto “estos sofás son rojo menstruación ¿no habían unos más feos?” ella no tuvo ninguna reacción, me sentí incómodo.

-¿Qué pasa Ed?- pregunte finalmente, luego de un suspiro ella respondió.

-Esto idiota.- dijo acercando su teléfono, se trataba de aquel libro de poemas que encontré en Wattpad, se veía distinto, tenía un ícono de función editar, ahí lo entendí.

-¿Lees para burlarte de mí?-

-Ed yo…-

-Se te hace gracioso seguramente ¿no?- empezó a llorar, no soy bueno con etas cosas pero intente calmarle, lo cual salió mal. Ella preguntó.

-¿Qué haces leyendo esto?-

-La verdad… me encanta la forma de expresión que tienen estos escritos, en especial los más antiguos, es como si leyera algo que yo escribí.- sonreí forzadamente, ella solo miraba al suelo.

-Esos escritos son para ti y para Rayel.- aquella frase me había dejado mudo.

-¿Por qué me dices esto?-

-¿Por qué no hacerlo?-

-Pero…-

-¿Qué?- me quedé en silencio.

-No pensaba decir nada, pero por impulso al reconocer tu apellido en esa estúpida notificación, no pude evitar decir todas esas tonterías- continuó.

-Enserio hay tantas cosas que me consumen, como cuando Rayel empezó a seguir mi perfil, aunque ella no lo sabe…- se secaba las lágrimas mientras hablaba, yo solo podía observar y escuchar.

-Sabes los últimos escritos que he hecho ni siquiera es sobre cariño hacia cualquiera de los dos, si no de celos, me contó lo que pasó hace 3 días, los envidié a ambos, pero más a ti, por que no se si lo sabes pero estoy tratando de salir con alguien, pero al mismo tiempo puedo ver mis dos amores platónicos ser el uno para el otro.-

La conversación se desviaba cada vez más, siendo honesto quería seguir escuchando, pero verle así se me era difícil, me decidí a abrazarla, no fue hasta entonces que pude sentir el olor a alcohol, su mirada perdida y temblor general de su cuerpo. Estaba muy mal.

Le acosté un momento, le pedí que me esperase, llame a Harris para posponer mi cita a mañana, cuando le explique el por que accedió rápidamente, fui a la tienda compre dos sopas instantáneas, fui a la farmacia conseguí suero bebible, para luego volver. Mientras las sopas se hacían en el micro, me dispuse a hacer café.

Le hice beber el suero poco a poco, sonó la alarma del micro, traje las sopas con cubiertos y le hice comer, ambos comíamos en silencio, ella tenía la mirada aún algo perdida, así que luego de comer le dejé dormir un par de horas, me quedé ahí con ella, mis tíos trabajaban jornadas algo largas según recordaba, así que no había ningún problema si estaba ahí.

Cuando Edith despertó, le serví una taza de café con algo de leche, ella se encontraba mejor pero aún con algo de malestar por la resaca. Luego de acabarse la taza y ver que estuviese bien soltebunbsuspiro y me prepare para irme, hasta que una mano detuvo mi marcha.

-¿Te quedas conmigo?- realmente no quería hacerlo, pero verle así me trajo recuerdos sobre Hilda, así que no pude negarme.

El silencio inundó la habitación, el piso color caoba y sus sillones rojo chillón solo hacían que la situación se desarrollase en un ambiente incomodo,  al menos para mi, siempre odie esta decoración, pero el asunto era otro.

¿Qué diablos estaba pasando con ella? Las posibilidades podían se muchas, todo estas cosas me eran difíciles, me sería más fácil consolarle de lejos acariciando su cabeza con una escoba,  la observé de reojo sentada junto a mí con la mirada algo perdida sin brillo en los ojos, como si la chica que con ironía y mucha luz una vez me dijo “hola que sorpresa es una vagina” en nuestro reencuentro, solo fuese un cascarón vacío.

-¿Me veo como la mierda no es así?- soltó aquella frase por sorpresa, rompiendo al fin el silencio.

-Siempre te ves como la mierda.- dije con humor tratando de hacerle sonreír, evidentemente falle.

-¿Qué demonios hago con mi vida?- Edith soltó la pregunta con un tono melancólico. Aunque no quería involucrarme no pude evitar preguntar.

-¿Qué haces con tu vida Ed?- su rostro carente de expresión se volvió hacia mí.

-No tengo idea.- dijo sonriendo, soltando un par de lágrimas mientras sus ojos seguían sin expresión alguna, le pedí que me explicara y así lo hizo.
Tomó su celular y luego de hacer un par de movimientos, una notificación apareció en mi móvil “EMB05 actualizó su historia...”  seguido de esto procedí a leer aquel título que me desconcertó algo que sin duda no esperaba.

“¿Quién eres para mí?”

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NOTAS DEL ESCRITOR.

Ha sido una larga espera para un episodio algo corto, una disculpa por eso, han sido meses difíciles, pero trato de seguir escribiendo, esta vez quizá con nuevo capítulo algo diferente, sin anotaciones finales y con el suspenso de el título de este nuevo escrito de Edith, espero hayan disfrutado y sigan disfrutando de esta pequeña obra, y quédense pata conocer un poco más de este encuentro.

Solo les tengo una pregunta para esta vez...

¿A qué se refería Edith con "intento salir con alguien"?

Nos vemos pronto, la siguiente parte está en sus últimos re toques, gracias por leer.