el otro lado 𖦹 𝙅𝘼𝙀𝙔𝙊𝙉𝙂

❀― capítulo veintidos.

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Cuando abres los ojos recién ahí notas que te encuentras acostado boca abajo y al querer moverte, tu cuerpo te envía una corriente de dolor que impide cualquier movimiento posible.

― ¿Qué...? ― hablas, pero la voz te sale partida, completamente afónica.

Cierras tus ojos, tratando de hacer memoria y pequeños flashes golpean tu mente, más no puedes asegurar qué significaban, es que solo recuerdas algunos fragmentos, como tener mucho calor, después crees haber escuchado la voz de Doyoung, luego la voz de Jaehyun, y nada, hay un bache, oscuridad, no hay nada ahí.

Pero no tienes que ser un genio para darte una idea de lo que sucedió, no cuando tu cuerpo duele más que la primera vez que habías ido a un gimnasio, y menos aún cuando estabas completamente sudado, te sientes sucio sintiendo cómo algo húmedo baja de tu trasero.

Te sorprende un poco no haber entrado en crisis, o quizás aún no has asimilado que acabas de perder la virginidad de tu culo con otro hombre, lo que te convierte de algún modo en gay, aunque si lo repensaras, en este mundo no es un problema ser gay. 

En realidad, siempre te consideraste una persona abierta con el tema, pero ahora te das cuenta que tal vez no lo eras, ya que si eras gay lo estabas comenzando a considerar como si fuera una infección o un contagio, un problema, cuando no debería ser así. Técnicamente no debería de tener nada de malo, pero quizás, sólo tal vez, no eras tan diferente al resto de los homofóbicos.

Pero si tienes que ser honesto, la verdad es que como no sabes qué pasó exactamente, y dar vueltas sobre otras cosas siempre te ha ayudado, por ejemplo, a que no te dé tiempo de sentir vergüenza.

¿No había una canción que decía algo así? ¿Algo como que si no me acuerdo, no pasó?

El problema que estabas teniendo realmente ahora, y que impedía que entres en crisis con tu posible homosexualidad recién descubierta, era que querías ir al baño, tu vejiga estaba pidiendo ser liberada y no podías moverte. ¿Te iba a odiar Doyoung si te hacías encima de su colchón? Porque no tenías ni fuerzas para moverte al borde de la cama.

Escuchas la puerta ser abierta y tratas de mirar quién es, pero realmente hasta mover tu cabeza era imposible, aunque no tuviste que pensar mucho quién podría ser, cuando el olor a café inunda tus fosas nasales.

― Hyung, haz despertado. ― susurró Jaehyun, y podías sentir lo nerviosa que había salido su voz.

― Ayúdame, necesito ir al baño. ― dices con la voz afónica, casi que parecía que ibas a llorar, y si tenías que ser honesto, no estabas lejos de hacerlo.

Realmente necesitabas ir al baño.

― Vo-voy... ― tartamudeó el alfa menor y sentiste cómo eras girado hasta quedar boca arriba, quejándote por lo horriblemente doloroso que fue todo ese pequeño proceso. ― L-lo siento, hyung, a-abráceme. ― tomando tus brazos los llevó sobre sus hombros, por lo que hiciste lo que te pidió, él te tomó desde la parte trasera de las rodillas, la espalda y te cargó de forma nupcial, llevándote hasta el baño. ― Va a tener que hacer sus cosas sentado, hyung. ― informó, dejándote sentado en el retrete.

― De cualquier modo, a veces lo hago así. ― respondiste, sintiendo un gran alivio cuando por fin pudiste comenzar a vaciar tu vejiga, haciendo que el dolor corporal quedara en un segundo plano.

― Doyoung también, dice que es más higiénico. ― comentó, viste de reojo cómo ponía el tapón de la bañera y giraba la canilla para cargar la tina, de cuclillas.

Te quedaste mirando su espalda, la cual estaba rasguñada y hasta cargaba algunos moretones, por lo que fuiste bajando la mirada hasta el pantalón de algodón, siendo lo único de ropa que portaba el menor.