Rescued, rette mich cuarto libro ( bill kaulitz y tn )

Capítulo 11

Bill kaulitz;

Seguía recordando aquella pesadilla, y también aquella llamada donde tn estaba llorando, todo era tan raro. Iba regreso a casa, ya era noche, ya había salido de trabajar, la misma rutina de siempre, a veces si estaba harto de eso, mientras caminaba iba cantando, y entonces también recordé aquella vez que cante frente a tn, me dió pena y no pude evitar sonreír un poco.

Realmente nunca había cantado delante de una chica y cuando lo hice frente a ella sentí confianza, ella me inspiró lo que nunca nadie pudo inspirarme, por eso empezaba a dudar de mis sentimientos por ella.

Más que nada por qué también fue la primer chica que me escucho cantar, pero que sobretodo reconoció que los chicos y yo teníamos talento y que podríamos continuar con nuestra banda, ninguna otra chica, mucho menos greta había sido tan sincera como tn, es más ni siquiera mi tía o alguna mujer cercana, solo tn era la que me podría apoyar con el sueño de ser alguien reconocido y famoso, al igual que el sueño de tom, georg y gustav, pues queríamos continuar con la banda.

Entre a la casa, era una noche fresca, con viento.

Ahí se encontraba tn, sentada en el mismo sofá de siempre, observando su celular, cuando se percató de mi presencia, dejo de ver el celular para ponerme total atención, me sonrió un poco, le devolví la sonrisa.

-hola bill...- dijo por lo bajo, yo me quedé pensando si era bueno contarle sobre lo que pasó -¿bill?- preguntó

-ah, hola tn...- me senté a su lado, me incliné un poco y apoye las manos en mis rodillas -tengo algo que decir-

Hubo un incómodo silencio, me daba miedo decirlo.

-familia tenemos que hablar- dijo tn soltando una risa, yo la mire un poco mal -ya ya, continúa- se tranquilizó

-ayer...- hice una pausa -¿de casualidad no me llamaste?- pregunté, la voltee a ver y ella frunció el ceño

-¿de que hablás?- dijo -yo no llamé a nadie- negó

-bueno, quizás me equivoqué, a lo mejor ví mal-

-¿aja?- entrecerró los ojos -¿pasó algo?- preguntó

-no...- negué con la cabeza -no es nada, ya te puedes ir a tu casa, adiós- me levanté y subí las escaleras

Solté un suspiro enorme, ¿Por qué era tan estúpido?

Toda la maldita semana la pase pensando en aquella pesadilla, quería contarle a tn, pero no tenía caso, de igual manera era algo que no le debía importar y en cuanto a la llamada, quizás esa vez estaba drogado.

La droga me hacía alucinar, ver y escuchar cosas que no eran, entonces probablemente fueron solo efectos de la cocaína. Ahora mismo me encontraba acostado sobre el sofá, hace tiempo que no salíamos como antes al skate, no sabía si al menos dar una vuelta por la colonia, o si invitar a los chicos a casa, por qué a decir verdad estaba bastante aburrido, y la ansiedad de drogarme me estaba consumiendo poco a poco.

Abby estaba en el trabajo con tom, y yo no sabía que hacer estando solo, quizás salir con tn, no mejor con greta, no quería ilusuonarla, ni ilusionarme yo, además de que todavía seguía pensando en la pesadilla, no sabía que hacer de verdad, todo esto me resultaba difícil, para mí maldita suerte cada vez que estaba frente a tn tenía unas inmensas ganas de besarla y de abrazarla, no entendía la puta razón, por eso mismo prefería estar con greta, que estar con ella, por qué estaba seguro de que ella se iba a hacer ideas que no eran y malinterpretaria las cosas, más bien los besos.

Salí un rato con greta, después de todo ella era mi mejor amiga, no había nada de malo en eso.

Pero mientras estábamos jugando a empujarnos, ella por poco tropieza y entonces yo la detuve de la cintura, hubo un momento en el que casi estaba por besarme, solo que voltee al percatar la mirada de alguien a unos pocos metros, era tn la que observaba la escena.