𝗣𝗥𝗢𝗛𝗜𝗕𝗜𝗗𝗔 𝗦𝗨 𝗖𝗢𝗣𝗜𝗔 𝗢 𝗔𝗗𝗔𝗣𝗧𝗔𝗖𝗜𝗢́𝗡.
PRIMER LIBRO.
Para Hiraki Samoto, su vida había sido dura provocando que en un momento de demasiado aburrimiento y soledad, deseará que llegará el día de su muerte, lo que no sabía era que...
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Sasuke y Sakura se colocaron a los costados, ambos abrieron las puertas dándonos pase a Naruto y a mí.
Al entrar pudimos observar a diversos ninjas de diferentes aldeas, la mayoría era de Konoha, cerramos tras despedirnos de Kakashi.
— ¿Qué es esto? — Naruto tenía una gran sorpresa al ver a los genin's.
— Creo que no estaremos solos.
— Sakura, Sasuke, Naruto, ellos son shinobis que también presentarán el exámen chūnin, no se sorprendan. Pero tampoco sean tan tontos. — Expliqué mientras recordaba lo que sucedía en el anime, para este momento ya debería haber llegado Ino.
Los shinobis nos observaban, en especial a mí, pero era en una parte en específico. Mi ceño se frunció y observé dónde ellos hacían, oh, ya.
«En serio, en algún momento tendré que dar a conocer mis pechos pero de verdad, que pervertidos.»
Alcé mi mirada molesta, a lo cuál la mayor parte retiró la mirada, a lo lejos visualice a Neji y su equipo. Los saludé emocionada.
«En serio amo a Neji, Lee lo siento pero tú debes estar con Tenten, yo me quedó a ese bello hombre.»
Un sonrojo se asomó cuándo Neji correspondió mi saludo, pero fuí sacada de mis pensamientos ante la voz estrepitosa de Ino Yamanaka.
— ¡Sasuke! ¿Dónde has estado? No tienes idea de cuánto desee que estuvieras aquí, extrañe tanto tu atractiva y varonil seriedad. — Mientras que Ino tenía un sonrojo, Sasuke solo la observaba con aburrimiento.
Pero Sakura era otro tema.
— ¡Oye! ¡Quítale tus manos de encima Ino puerca!
— Señorita gran frente, te han dejado venir, ¿has visto que tu frente aumento?
— ¡No te metas con mi frente! — De inmediato le sacó la lengua mientras jalaba la parte baja de su ojo.
Una mueca de asco me recorrió.
«Recuerdo que en mi vida pasa, los niños se metían el párpado dentro de el ojo, eran raros.»
Sacudí mi cuerpo ligeramente para quitar aquella mala sensación que me había dado por completo.
— Son ustedes. — La voz de Shikamaru nos sacó de ese ambiente, fruncí mis labios en una línea muy fina. — Sabía que tendría algo de aburrido, pero definitivamente esto es patético.
Me visualizo y se sorprendió al verme, claro, ya no era la niña de 10 años que cayó a sus encantos, mi traje ninja era diferente a lo que llevaba en la academia o en el diario.
Y cómo todos, su mirada estaba en mis pechos, mis cejas se crispaban y una pequeña gota de sudor bajaba por mi frente.
