¿Por qué Ella? [Dark Noremma]

☆ Capitulo 11

─★ ˙ ̟ !!

Ya había pasado un día desde la llamada con el superior Vicent, cinco días desde que Emma no había vuelto a casa. Los nervios los consumían a todos, simplemente no podían aguantar a que llegue el día siguiente para recién ir por ella, cualquier cosa le podría pasar a Emma.
Eran las ocho de la mañana, Oliver fue junto a Lucas a preguntar por noticias.

—Y eso fue lo que dijo mi superior—Yuugo dejó salir un largo suspiro al acabar de explicar.

—Es inútil, le puede pasar cualquier cosa mientras esperamos a mañana, me niego a esperar—Oliver se levantó—Vayamos hoy!—

—¿Oliver estás demente? No pueden desobedecer a la policía—Su padre trataba de hacerlo entrar en razón.

—Papá, estamos hablando de Emma, mi novia y la niña que se ganó tu corazón apenas nació, no podemos esperar más si, en teoría, ya sabemos dónde está!—Oliver suspiró—Amo a Emma como jamás amé a nadie, es la chica más dulce del mundo, no podemos dejarla en aquel lugar con ese infeliz otro día más.—

—Oliver, por última vez, entiendo tu molestia y las ganas de que esté contigo nuevamente, yo también quiero volver a abrazar a Emma y cocinar con ella, pero simplemente no podemos desobedecer a los ofi—Yuugo intervino.

—A menos que sea otro oficial, ¿No?—Oliver se entusiasmó al oír eso—Yo tampoco voy a esperar a mañana sabiendo que mi niña esta tan cerca, voy a ir hoy.—

—¿Yuugo de que hablas? Es una locura lo que estás diciendo!—Su mujer trataba de que reaccione a lo que está diciendo—Además, estás incitando a que los demás—Una voz interrumpió.

—Yo voy—Oliver se sumó a Yugo.

—Igual, voy a golpear tanto su rostro que tendrán que reconstruirlo—Ray se levantó.

—Lucas, Iseabella, Leslie, ¿Me dan el permiso de qué vengan conmigo?—Los tres se miraron entre sí, dudosos, pero asintieron, sabían que por más que se negaran, verían la forma de irse.

—Eres un caos el 90% del tiempo, pero se qué estarán a salvo contigo—Isabella se acercó—Cuídense mucho.—

Los tres asintieron y subieron apurados a el auto de Yuugo mientras emprendían viaje. Por suerte, Osaka quedaba a menos de una hora de su ciudad. Un viaje silencioso, Yuugo iba lo más rápido que podía, mientras Oliver y Ray guardaban silencio.

—Oliver, Ray, cualquiera de los dos, ¿Pueden ver la ubicación de Emma?—El peliblanco asintió y comenzó a fijarse en su celular.

—Mierda! El celular de Emma seguro se apagó, ya no me marca nada!—Bufo frustrado.

—Que mierda, pero ya era hora, fue un milagro que durara casi cuatro días.—

Tenían miedo, no sabían cómo verían a Emma, si estaba bien, herida, nadie lo sabía.
Cuando finalmente llegaron, Yuugo miró por el espejo a Ray.

—Ray, vas a tener que ser nuestro guía, ¿Reconoces algo o dónde puede ser la casa?—El azabache veía para todas las direcciones, tratando de buscar algo familiar.

—De momento nada, pero recuerdo que estaba algo alejada, ¿Podes dar más vueltas a ver?—El mayor asintió, comenzando a dar vueltas por varias calles de Osaka.

Ray veía con desesperación todo lo que más podía, tratando de reconocer a algún lugar o ver algo que se le hiciera familiar, hasta que finalmente lo vio.

—Si! ¿Ves aquella florería? Si no mal recuerdo son unas tres o cuatro cuadras para abajo—Yuugo asintió e hizo tal cual lo que Ray dijo—Es ahí!—Señalo una casa en distintos tonos grises algo alejada de todo.