! ׅ࣪ alfa ׅ ࣪ nomin ✶ omegaverse ~ ࣪ ׅ

Ꮺ ָ࣪ capítulo 11 𓂃

⊹ ࣪˖⁩ tercer mes de embarazo ꒷꒦ ࣪.

Jaemin estaba muy ansioso, ese era el día de su graduación y finalmente acabarían las clases que lo agotaban. Sonrió inconscientemente y posó su manita sobre su ya más abultada y notable pancita, mientras se levantaba a buscar la ropa que tenía que ponerse para aquel día, que consistía en una camisa y un traje sencillo, que se aseguró le quedara un poco más grande, pues no quería hacerle daño a su bebé usando ropa ajustada, tal como le había dicho Jisung.

Su novio lo estaba esperando en la sala con un traje de igual manera. El omega se dirigió a bañarse y a arreglarse, saliendo pocos minutos después para maquillar un poco su rostro, de manera natural, así como Haechan le había enseñado. Salió de la habitación dirigiéndose hasta donde se encontraba Jeno, quien al verlo sonrió y se levantó para acercarse.

–Te ves hermoso, amor. – Dice para luego besar sus labios de manera lenta y delicada.

–Tú igual te ves hermoso, Nono. – Dice mirándolo de arriba a abajo y, sin pensar, muerde su labio inferior.

–N-no hagas eso, Nana. – El mayor lo mira con sus profundos ojos.

–¿Qué cosa, Nono? – Pregunta con, obviamente, falsa inocencia.

–T-tú sabes qué, p-princesa. – Suelta un suspiro al sentir a su omega besar su cuello. –S-sabes que estoy e-en mi celo y t-tenemos que ir a tu g-graduación.

–P-pero, Nono. – Pucherea jugando con un mechón castaño de su novio. –Quiero hacerlo. – Se sonroja mientras continúa jugando con el cabello de Jeno.

–Te prometo cuando volvamos de tu graduación, ¿sí, amor? Sé que estás sensible por esto del embarazo y con aquellos deseos, pero hoy tendrás que esperar, dulzura. – Besa su frente y se dirige a la cocina, dejando a Jaemin con un puchero en sus labios e indignado se sienta en el sofá con sus brazos cruzados sobre su pancita, esperando a su novio, él cual llega y lo ve allí, con su boquita fruncida y abultada, que lo hace sonreír en grande, se dirige hasta Jaemin y lo carga estilo princesa con sumo cuidado, haciendo al otro fruncir más su ceño.3

–Vamos, bebé. – Le besa la mejilla. –No te enojes, ¿sí, amor?

–¿No quieres estar conmigo, Dottori? – Pregunta con lágrimas en sus ojitos. –¿Es eso? ¿Estoy feo y gordo? – Se lanza a llorar, importándole poco que su maquillaje se arruine. Estos cambios de humor, por Dios, piensa Jeno para luego dejar de nuevo al omega en el sofá, limpiando los rastros de lágrimas en sus suaves mejillas.

–Nana, mi amor, mi bebé, mi omega, mi princesa. – Acuna el rostro contrario en sus manos. –Eres la persona más hermosa y perfecta que ha pisado esta Tierra, jamás en mi vida te encontraría feo y gordo. Eres el amor de mi vida y jamás haría algo para lastimarte, Nana. – Le besa la punta de su naricita, logrando que el otro ría levemente. –Eres hermoso y perfecto tal y como eres, y no cambiaría nada de ti, amor, por nada ni por nadie. – Ahora el menor comienza a llorar de nuevo, escondiendo su rostro en el cuello del mayor. –¿Dije algo m-malo, bebé? – Pregunta nervioso acariciando la cabellera contraria con delicadeza.

–Eres un tonto, Dottori. – Golpea sin fuerza su pecho. –Me haces llorar. – Levanta su rostro y le da un prolongando y tierno beso a su novio.

–Te amo, Nana. – Besa su frente y se levanta, para luego ofrecer su mano a su omega. –¿Vamos a terminar de arreglarnos, amor?

–Vamos Nono. – Toma la mano contraria gustoso y se dirigen nuevamente a la habitación.