El Legado de Hope Mikaelson: Las Crónicas De Los Originales

Capítulo 12: Los pecadores de Nueva Orleans

La luna llena estaba en la cima del cielo, empapando con su luz a la Ciudad de los Muertos. Las estrellas titilaban a su alrededor como pequeños luceros, tan insignificantes que casi no se hacían notar. En ese momento ni una pizca de aire soplaba y las calles de Nueva Orleans estaban humedecidas por la tormenta que hace un momento había amenazado con destruirlo todo, poniendo en juego la supervivencia de cada una de las especies que habían luchado todo este tiempo para marcar terrorio. El hedor a sangre derramada por los antepasados aún podía sentirse en el aire. A lo lejos se percibía el repicar de las campanas anunciando que ya era medianoche por lo que no quedaba mucho tiempo para lanzar el hechizo que traería de regreso a El Vacío permanentemente a este mundo. Los Ancestros observaban desde el plano, preguntándose cómo acabaría todo esto y si las chicas de la cosecha serían capaces de regresar a El Vacío a la oscuridad en la que siempre estuvo destinada a estar. Ni siquiera ellos que habían visto la profecía tenían alguna idea de qué sucedería a continuación. Así que permanecieron allí sin ninguna otra opción.

Mientras que en la Ciudad de los Muertos todo se sumía en un caos inminente. Las brujas salieron de la luz hacia la oscuridad preparándose para lo peor. Los cánticos reverberaron por todo el cementerio, dispuestas a lanzar el hechizo que los volvería a vincular con sus ancestros.

EI Vacío permaneció en el altar a punto de perder la paciencia—"¿Por qué hiciste eso, Vincent? Iba a acabarlo".

"¿Es que no lo ves? Estamos a punto de vernos inmersos en una guerra entre nuestra especie y la de los vampiros. Ahora que tenemos a Hope la familia Mikaelson no se detendrá hasta que la recuperen, aunque tengan que matarnos a todos en el proceso si es necesario. Como te dije hace un momento, el veneno que yace en las venas de Marcel puede matar a un Original. Lo necesitamos, Inadu. Si vamos a enfrentarnos a los Originales, si vamos a declararles la guerra y recuperar nuestra ciudad de los vampiros, de Marcel Gerard entonces necesitaremos un respaldo. Vamos a necesitar algo que pueda acabar con esa enfermiza familia que no ha hecho más que envenenar a nuestra ciudad de una vez por todas".

—"¿Estás seguro? Por qué veo entonces duda en tus ojos".

Antes de que Vincent pudiera responderle Freya irrumpió en el cementerio.

"Se acabó, Inadu. Devuelve a Hope ahora, ríndete" Le dijo mientras se abría paso a través de el santuario de las brujas.

Inadu se rio a carcajadas, blandiendo una daga, cuya hoja reflectaba la luz de la luna, creando un truco de luz—"¿Quién te crees que eres para darme órdenes a mí? No eres más que una bruja patética comparada con el poder que le he prometido a todo el aquelarre del barrio francés. EI hechizo ya ha comenzado y no hay nada que puedas hacer para detenerlo. Hope morirá y será consagrada con los ancestros, alimentando el poder ancestral que les corresponde a las brujas por derecho"—

Marcel se levantó del suelo, sosteniendo la mano de Kol—"¿Estás bien, amigo?".

Marcel asintió—"Lo estoy. Salvemos a Hope y acabemos con esto de una buena vez".

"Es hora de darles su merecido a estas brujas. Mandémoslas al infierno al que pertenecen" Dijo Kol, mostrándole una sonrisa mezquina.

"Freya" Le dijo Hope con una voz ahogada mientras la miraba directamente a los ojos—"¿Voy a morir, cierto?".

El corazón de Freya se partió en pedazos al escuchar lo que Hope le había dicho pero no permitiría que eso pasara, preferiría perder su vida antes de permitir que Hope lo hiciera. Le habían hecho una promesa a Klaus y estaba dispuesta a honrarla. Luego, entre todo el caos Freya encontró las palabras indicadas para calmar a Hope—"No, no lo harás. Te salvaremos. Recuerdas la promesa que te hicimos, ¿cierto? Siempre y para siempre. No dejaremos que nada malo te pase".