Capitulo 11

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Era yo. Subaru me abrazaba en el sueño. Me sentía muy feliz. 

-Lira- me llama la voz de Tougo.

-¿Qué ocurre?- pregunte.

-Tienes que irte de Japón. Es peligroso ahora- dice Tougo.

-Qué- dije sorprendida.

-Te iras de Japón. Por unos años- repite nuevamente Tougo.

-¿Porqué?- pregunte.

-Por qué hay vampiros en Japón que te quieren muerta- dice Tougo bajando la cabeza.

-Y ¿cuándo me voy?- pregunte tristemente.

-En tres días- dice.

Me sentía triste. Sentí que me arrebataban mi felicidad. 

-Y ¿a dónde iré?- pregunte.

-A Inglaterra- dice Tougo.

Me levanto de la cama y me dirijo al jardín. Me acerco al mimo lugar en donde conocí a Subaru. 

-Lira- escuchó la voz de Subaru.

Me volteo y veo que es él. Corro a abrazarlo.

-Subaru- dije tratando de aguantar las lagrimas.

-Lira ¿qué pasa?- pregunta desesperado.

-Me voy de Japón- dije llorando.

-Qué- dice Subaru tristemente.

-Me voy de Japón por algunos años- dije bajando la mirada.

Él rostro de Subaru mostraba tristeza.

Subari puso su mano en mi mentón para luego darme un beso en los labios.

Sentía que esta iba a ser una despedida muy dolorosa. No quería separarme de él.  

-Te quiero Lira- dice Subaru abrazándome.

-Lira- escuche la fría voz de Tougo.

-Tú- dice enojado Subaru.

Tougo toma a Subaru por el cuello.

-Detente- dije.

De repente mi cabello empezó a brillar. Mis ojos me empezaron a doler.

-Suéltalo- dije con una voz mas grave de lo común.

-Lira- dice Subaru sorprendido.

Siento un golpe en mi estomago y en ese instante caigo desmayada.

Cuando mis ojos veo que estoy en otro lugar.

-Ya despertaste- dice la voz de Tougo.

Trato de moverme, pero, me es imposible ya que me doy cuenta de que estoy encadenada.

-Suéltame- dije enojada.

-No creo que eso le haga bien a la que llevas en tu vientre- dice.

-Qué me hiciste- dije molesta.

-Solamente te deje mi semilla dentro tuyo- dice.

-¿Qué?- dije sollozando.

-Estas esperando un hijo mio- dice.

Yo nunca he tenido relaciones con Tougo a no ser...

-Maldito seas eres un asqueroso cómo pudiste haberme hecho eso cuando estaba dormida asqueroso- le grite en la cara.

-"Lo siento"- dijo una voz en mi vientre.

La voz era masculina y era de niño. Sonaba que de verdad estaba arrepentido. 

La chica de cabellos rojosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora