gatitos 𖦹 𝙅𝙄𝘾𝙃𝙀𝙉

⌂ 23 : extra.

―  Lo lamento. ― Mark trató de tomar la mano de Haechan sobre la mesa, pero el castaño la apartó tan rápido como vio venir eso. ― Yo... Lo siento.

Haechan asintió, pero solo eso, desesperando a Mark que parecía que en cualquier momento se echaría a llorar.

― ¿Sólo dirás eso?

― ¿Y tú? Me estás pidiendo disculpas pero ni siquiera has dicho la razón de ellas, y si no lo dices, no voy a entenderte, Mark.

 El de ojos cansados asintió, bajando su cabeza por vergüenza a verlo. ― Fue tonto, lo sé, pero me enamoré a los días de conocerlo, tú y yo llevábamos menos de un mes de 'relación' y creí que, que no sería tan importante porque no había amor, no mucho, al menos eso me hacía creer porque me sentía mal al saber que te estaba siendo infiel.

>> Pero él me gustaba, y yo a él también, y... Y no pude resistirme y ambos caímos. Traté de dejarlo, pero no pude, y eso me lastimó, sabía que te estaba hiriendo aún más porque no decía nada. Fue cuando dijiste que debíamos ponerle un título a esto, y créeme que me sentí prisionero porque no estaba de acuerdo, pero verte feliz, tan tú, me hizo sentir la obligación de decirte que sí...

>> Y cuando pasó lo de tu mamá, lo cual lo lamento mucho pero, por eso comencé a decirle a mis hermanas que dijieran que no sabían nada de mí, porque sabía que no estabas aquí, no tenías como confirmarlo, ― ceró sus ojos con fuerza, haciendo su mano un puño sintiéndose avergonzado. ― Pasaron cosas luego de eso, y por eso estoy así, por eso tampoco quería que me vieran porque lo sabrías con más rápidez y no, bueno, no tenía en claro cómo hacerte saber lo que había pasado.

>> Sin embargo me pareció mejor huír de todo y que entendieras que, yo jamás fui para tí, ni tú para mí.

Haechan asintió de acuerdo, se puso de pie y Mark alzó su mirada con algo de temor.

― Está bien, Mark. Pero no te acerques más a mí, es todo lo que te pido. Y te perdono, porque siendo sincero, me da igual en este punto de mi vida.

Y se fue de ahí, dejando a un dolido Mark que esperaba más que eso.

 ¿Pero qué más podía recibir si  él fue quien huyó de todo?

Suficiente tenía con que Haechan le haya aceptado la salida...

Haechan estaba guardando las cosas que ya no quería en una caja que le daría a Renjun para su trabajo de caridad, se sentía en calma al estar haciendo todo eso, deshaciéndose de cosas que ya no tenían importancia en su vida pues, por fin había pasado la etapa y se sentía en calma, más aún cuando en dos días iría de visita a la playa donde su madre se encontraba, e iría con Chenle, Jisung y los gatitos que aún seguían siendo suyos.

Pero ya tenía todo planeado, ellos irían sin chistar.

Miró los peluches, aquellas pulceras y ciertas cartas que jamás entregó y que no pensaba entregar nunca.

Sintió ese calor del recuerdo, pero que ya no importaba.

Ya estaba lejos de eso, y eso estaba bien.

Los guardó en la caja, siguiendo con la siguiente donde metería ropa y algunos accesorios que ya no usaba.

― Gracias por hacerte esto, Hae.

El menor rió y asintió. ― No tengo problema con eso.

Él le sonrió de vuelta, tomando una de las cajas para salir de ahí con nerviosismo.

Haechan no perdió la sonrisa, aún guardando lo que ya no quería, aquello que ya no era necesario en vida, y para cuando regresara, tener una nueva etapa en su vida.

Una donde la primavera adornara en su totalidad, derritiendo la nieve que quedaba del invierno, aquel que había hecho desaparecer hasta lo más mínimo, aquello que en algún momento lo dañó.