Capitulo 11

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---Antes de leer esta parte es recomendable ver el segundo y tercer capitulo del manga de Requiem Shinsengumi que se encuentra traducido en TuMangaOnline con el propósito de entender mejor la historia, ya que esta parte será la continuación de eso...

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---Antes de leer esta parte es recomendable ver el segundo y tercer capitulo del manga de Requiem Shinsengumi que se encuentra traducido en TuMangaOnline con el propósito de entender mejor la historia, ya que esta parte será la continuación de esos capítulos----


El dolor punzante recorrió el cuerpo de Hijikata al sentir la presión de la venda sobre su piel lastimada que apenas pudo contener un quejido entre dientes, al mismo tiempo Megumi, concentrada en su tarea, apretaba con firmeza la venda, sin mostrar ningún signo de compasión.

-¡AUCH! ¡Con más cuidado! - exclamó Hijikata, tratando de contener el dolor mientras su cuerpo se tensaba involuntariamente

-Eso les pasa por su imprudencia al ir tras ese criminal. ¡Ahora no tienen derecho a quejarse! - respondió la chica con un tono de reproche en su voz, aumentando la presión sobre la venda y provocando otro gemido de dolor por parte del peli castaño - Lo peor de todo es que lo dejaron escapar - añadió, con una mirada acusadora dirigida hacia él, como si buscara una explicación que pudiera justificarlo. Aunque era evidente que tratar de encontrar lógica en las acciones de alguien tan excéntrico como él sería una pérdida de tiempo.

Habían pasado exactamente cuatro días desde el enfrentamiento con el asaltante, pero las heridas de Hijikata aún no habían sanado por completo y no era sorprendente, considerando que seguía entrenando todos los días sin tomarse un descanso, lo que provocaba que los cortes volvieran a abrirse durante las prácticas.

-Pero prometió detener los ataques por un tiempo - se notaba en el rostro del futuro perro rabioso del Shinsengumi una expresión de alegría al recordar a esa persona, quien compartía sus mismos intereses y había hecho que aquel enfrentamiento con espadas los uniera como amigos inseparables. Una acción bastante estúpida que solo cometían las personas de mente simple, en opinión de Megumi.

-¿Al menos sabes cómo se llamaba? - preguntó ella, con curiosidad, mientras continuaba cuidando las heridas de su compañero

-Okada Izou - al escuchar ese nombre, Megumi se inclinó hacia adelante de forma inconsciente, pero rápidamente recuperó la compostura - (No pensé que se tratara de él... Ahora me estoy arrepintiendo de no haber acompañado a este par) - confesó para sí misma, lamentando perder la oportunidad de conocer a uno de los cuatro asesinos más famosos de la historia de Japón.

-¿Lo conoces? - al notar la actitud distraída y un tanto insegura de la chica, Shinpachi decidió profundizar en el tema.

-No lo conozco en persona, pero he oído hablar de él. Si mal no recuerdo, fue puesto a cargo de Takechi Hanpeita cuando era pequeño, por lo que ambos viajaron juntos por varias escuelas de artes marciales y esgrima. Sin embargo, se aburrió cuando no pudo encontrar un rival que estuviera a su altura en combate - ella sabía mucho más sobre Izo, pero mencionar más detalles implicaría referirse a eventos futuros, así que optó por guardar silencio.

Lycoris Radiata DT (Okita Souji x Reader)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora