XVIII.

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¿Había mencionado a la abuela Kokoro con mala intención?

Sí, eso exactamente había hecho.

No pudo evitar mencionarla cuando vió a Sanji tan emocionado por encontrarse con una linda sirena, habían sido simples celos, no era la primera vez que los sentía pero ahora le costaba más controlarse y eso hacía peor la situación. Así que había hecho que el rubio se sintiera mal por recordar cuál había sido la verdadera primera sirena que conoció, bueno, se sintió mejor por unos segundos hasta que notó que realmente lo había deprimido. No tuvo más opciones que seguirle el juego y decir que sí, que Camie era la primera sirena que conocían, era mejor verlo con una sonrisa que derrotado en el suelo y sin esperanzas de seguir adelante.

No esperó que incluso Zoro borrará a la abuela Kokoro de sus memorias pero no dijó nada al respecto, solo pudo reírse ante la sorpresa de Chopper por su inesperada acción, todo era relativamente tranquilo hasta que la sirena fue secuestrada por los mismos que se habían llevado a su amigo, quien resultó ser el pulpo que participó en el tormento de Nami, Usopp por su parte no estaba muy seguro de haberlo perdonado como lo hizo la navegante pero tampoco opinó en contra de sus decisiones. Confiaba en el juicio de esa mujer tan determinada. Lo que más lo sorprendió fue el líder, aquel que había planeado todo y parecía tener un rencor personal contra ellos, sí, aquel que tenía el rostro del cartel de búsqueda de Sanji.





—Pobre Sanji...






Murmuró con pesar, Nami asintió a su lado de acuerdo, ambos tapando su boca por la sorpresa de ver a ese hombre y escuchar sus motivos para hacer todo eso. Su mirada se cruzó más de una vez con la de Sanji, quién estaba obviamente afectado y parecía buscarlo con bastante frecuencia, sinceramente no creía que se pareciera en nada a ese cartel y le parecía injusto que no se pudiera apreciar mejor el atractivo del cocinero pero tampoco podía negar que sí le había echo un poco de gracia las palabras de Zoro y la risa de Brook. Solo se contuvo porque veía lo mal que lo estaba pasando el rubio. Quiso lanzarse al agua cuando lo vió hundiéndose y no salía tras largos minutos de espera, aunque Camie fue la mejor opción, se preocupó demasiado pero se tranquilizó instantáneamente al verlos salir ilesos.

Los siguientes sucesos fueron rápidos y de algún modo menos estresantes que lo que habían estado viviendo continuamente, incluso pudo relajarse mientras comía takoyaki y se preparaban para ir a su próximo destino.

Una isla que producía un tipo especial de burbujas, un paisaje encantador.

El Archipiélago Sabaody, eh

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El Archipiélago Sabaody, eh.

Burbujas que nacían del suelo, árboles con raíces gigantescas y números marcados en sus troncos... Era un paisaje bastante cautivador, tal vez por eso decidió bajar del barco y dar un paseo por el lugar, todo le resultaba curioso. Se lanzó desde el barco y comenzó a caminar, no esperó que fuera precisamente la voz del cocinero lo que lo estuviera, aunque escuchar la preciosa voz de Usopp lo hizo girarse y mirarlos con fastidio (fastidio dedicado solo a uno).

🚬 Usopp es nuestro 🗡️ [One Piece]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora