your lips my lips - sungsun

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Al día siguiente cuando Sunghoon despertó la cama estaba vacia. Le extrañó asi que se levantó y revisó toda la casa, pero no había rastro de Sunoo. Le escribió varios mensajes, pero estos no fueron respondidos en todo el fin de semana.

Aun así Sunghoon decidió restarle importancia al asunto, esperando ver a Sunoo el lunes al volver a clases, pero tampoco fue así. Y la cosa no fue muy distinta los siguientes días.

Sunghoon no sabía qué hacer. ¿Acaso Sunoo se arrepentía de lo que habían hecho? ¿y si ahora lo odiaba? Sunghoon quería hablar con él, decirle que no estaba solo, que podían estar juntos. Pero Sunoo no le daba la oportunidad. Siempre estaba rodeado de gente, o se iba corriendo al terminar las clases.

Cada vez que se lo cruzaba e intentaba acercarse, Sunoo parecía huir de el. Sunghoon se sentía frustrado ¿que había pasado con el chico sonriente que tanto le gustaba?

El viernes, cuando la semana estaba cerca de terminar, Sunghoon decidió que ya era suficiente. Se armó de valor y fue a buscar a Sunoo a su casa, no le importaba si estaban sus padres, sw pelearia con ellos si era necesario. Llamó al timbre y esperó. Al cabo de unos segundos, la puerta se abrió y Sunoo apareció. Tenía los ojos rojos e hinchados, como si hubiera estado llorando.

- Sunghoon... ¿qué haces aquí?

- Necesito hablar contigo, Sunoo. Por favor, déjame entrar - rogó Sunghoon.

- No, no puedes. Mis padres pueden llegar en cualquier momento - dijo Sunoo nervioso.

- Sunoo, por favor. No puedo soportar más que me sigas ignorando, tenemos que aclarar las cosas - insistió Sunghoon.

- No hay nada que aclarar. Lo nuestro fue un error, Sunghoon. Un error que no podemos repetir - dijo Sunoo con frialdad.

- ¿Un error? ¿Cómo puedes decir eso, Sunoo? ¿No sentiste nada cuando nos besamos? - preguntó Sunghoon preocupado

- Claro que sentí algo. Sentí que estaba traicionando a mi familia, a mis principios, a mi destino. - respondió Sunoo con lágrimas en los ojos. - Tu y yo... no estamos hechos para estar juntos Sunghoon, no es lo correcto.

- Sunoo, no digas eso. No hay nada de malo en lo que sentimos, no puedes seguir negand-

- Sunghoon basta, vete - interrumpió Sunoo

- Porfavor, Sunoo...

Pero Sunghoon no recibió respuesta alguna. Antes de que pudiese decir algo más Sunoo le cerró la puerta con un golpe. Cuando se giró se encontró a su hermana Chaewon, mirándolo con curiosidad. Esta se acercó a Sunoo y le abrazó con ternura.

- Sunoo, ¿qué pasa? ¿Quién era ese chico? - le preguntó la mayor

- No estoy de humor ahora para tus tonterías Chaewon, déjame - respondió Sunoo separándose del abrazo y dirigiéndose a su habitación.

Chaewon lo miró subir la escalera algo preocupada. Siempre habia tenido cierto resentimiento con su hermano porque era todo lo que sus padres esperaban por hijo, dejandola como una decepción, y por eso solía molestarlo. Pero al final era su hermano y, aunque no lo mostrase mucho, lo quería. Pensó si debería seguirlo ya que sabía que no eran muy cercanos, en gran parte por su culpa, pero tampoco podía dejarlo solo.

Chaewon decidió seguir a Sunoo a su habitación, aunque sabía que probablemente no le haría mucha gracia. Llamó a la puerta y esperó a que le respondiera, aunque fue para nada.

- Sunoo, soy yo ¿Puedo entrar? - preguntó con suavidad

- No, vete - contestó Sunoo con voz apagada. Lo último que deseaba en ese momento es que su hermana le molestase, demasiado lio tenía ya con lo de Sunghoon

- Vamos, Sunoo, no seas así. Sé que algo te pasa, y quiero ayudarte - insistió Chaewon.

- No necesito tu ayuda, Chaewon. No entiendes nada - replicó Sunoo.

- Pues hazme entender, Sunoo. ¿Qué te pasa? ¿Quién era ese chico que estaba en la puerta? ¿Es tu amigo?

Sunoo se quedó varios minutos en silencio, pensando en si debería confiar en su hermana por esta vez. Suspiró y se levantó de la cama para abrir la puerta. Sabía que no podía seguir ocultando la verdad, y que tarde o temprano tendría que enfrentarse a las consecuencias. Quizás su hermana podría entenderlo, o al menos no juzgarlo tan duramente como sus padres. Después de todo, ella también era diferente, y sabía lo que era sufrir por ello.

- ¿Puedes guardarme un secreto? - preguntó Sunoo mirando a su hermana desconfiado

- Claro, cuéntame

- Ese chico... no era un amigo. El me gusta

Chaewon lo miró sorprendida por su confesión. Sunoo siempre había sido justo como sus padres quería que aquello era lo último que esperaba. Tras procesar las palabras de su hermano relajó su expresión y le sonrió mientras se adentraba en la habitación y se ponía cómoda. Definitivamente Sunoo necesitaba de su compañia en ese momento, así que decidió dejar todo el rencor acumulado durante esos años y se sentó, dispuesta a escuchar lo que este tuviese que decir.

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HOLAAAA
Logré actualizar sin desaparecer tres meses que felicidad jeje
Voy a actualizar mas este finde!! capaz suba alguna historia mas

Estoy pensando en hacer otra historia nueva pero no se su hacerla de sungsun o purinz TT

en fin, nos vemos en la próxima actu (pronto) muakkk