...
—Así que pasaron toda la noche hospedadas en un hotel?—Vidalia se volteó del asiento copiloto para mirar a su amiga Margaret y estiró sus labios haciendo la típica mueca de sonrisa pícara.
Peridot comenzaba a ponerse inquieta, no quería que nadie lo supiera pero como había sacado sus conclusiones no podía hacer más.
—Si.—Contestó Margaret mirando a su amiga.—Nos quedamos dormidas y terminamos en esta ciudad, por lo que tuvimos que hospedarnos en un motel.
Tanto Vidalia como Sunstone se quedaron perplejos con sus bocas abiertas, y Peridot no dudó en hablar.
—PERO NO PASÓ NADA!!! ASÍ QUE NO HAGAN IDEAS SUCIAS!!
Ambos se rieron y Margaret tomó la cabeza de su novia para acariciarla.
—Peridot, creo que está demás tu reacción de niña, además ellos no lo irán contando a los cuatro vientos. Son de confianza.
—En serio?—Miró a los chicos de adelante a través del espejo retrovisor.—No dirán nada a los de la clase?
—No te preocupes Peri, ya todos saben que ustedes andan y pues nadie te juzgará como a lo mejor piensas. Todos hemos madurado para saber que dos chicas también pueden estar juntas.—Afirmó Vidalia mirando a Peridot con una sonrisa.—Yo las apoyo y no dejaría que nadie les hiciera daño.
Peridot sintió más serenidad al escuchar las palabras de Vidalia, a lo cual se relajó, miró a su novia y tomó su mano en lo que regresaban a su ciudad.
...
Pov Peridot
Finalmente llegamos a la ciudad donde vivimos. Margaret me estaba diciendo que se quedaría en casa de su amiga Vidalia por hoy así que estaré más tranquila.
Sunstone nos dejó cerca de mi casa, me bajé no sin antes de que Vidalia igualmente lo hiciera para alejarme un poco de la camioneta y me dijera lo siguiente.
—Peridot. El 28 a las 19 horas se hará Margaret la intervención y ella seguramente querrá que estés presente. Podrás ir?
—Claro que iré! No pienso dejarla sola en ese momento tan importante.
—Me alegra oír eso. Ella aunque no lo demuestre por la ansiedad que tiene está muy feliz de estar contigo, y quizá ya te lo demostró por lo que empezarás un camino con ella.
—Pues puede que tengas razón.—Me rasqué la nuca un poco avergonzada.—Cuenta conmigo porque estaré a su lado.
—Qué linda!—Tomó mis manos y sonrió.—Si tuviera los mismos gustos que mi amiga también me habría fijado en ti.-Pellizcó mi mejilla.
Porqué dijo eso? Tampoco soy tan linda como para que lanzara ese comentario.
—Me dolió!—Dije al mismo tiempo que llevé mi mano a la mejilla.
—Perdona! Bueno te cuento que Amatista también irá con nosotras, y claro Perla la que tiene el capital. Otra cosa, no menciones nada de esto a mi novio ok? Él cree que iremos a una pijamada todas en casa de Perla.
—Ahh... Si no hay problema Vidalia.
—Bien! Ahora me retiro. Estaré con tu novia para que se sienta más tranquila... Se que no anda en la mejor condición por lo que pasó con su padre. Cualquier cosa te llamo.
—Bien. Anota mi número.
Vidalia tomó mi contacto y se retiró subiéndose al copiloto. Margaret me vio a través del espejo y levantó su mano para despedirse de mi... Hice lo mismo sonriéndole y cuando la camioneta partió me devolví a casa.
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El delirio de la madurez [Lapidot]
Romance"Aunque hayamos nacido en diferentes tiempos pareciera que solo tú entiendes mejor mis sentimientos que cualquiera." Lapis al graduarse de pedagogía decide ejercer su profesión en una escuela normal, haciendose cargo temporalmente de una clase en es...