ESTORBO [Papulince x Panafresco]

#10: Esto es raro

• Miguel

Mierda, mierda, MIERDA, ¡¿cómo carajos tropecé con ese pendejo?! ¡¿Y POR QUÉ PUTAS TUVIERON QUE CAERSE MIS LENTES?!

Vio mis ojos, vio mis ojos, vio mis ojos.

«—Qué bonitos ojos tienes, papu :v»

¿Bonitos? De seguro sólo lo dijo por no sonar como otro imbécil, nadie nunca ha dicho que mis ojos son bonitos, son una mierda, parezco fenómeno, siempre me lo han dicho.

—Papu, ¿estás ahí? —dijo tocando la puerta del baño.

Escucharlo me hizo salir de mi trance, incluso me di cuenta que mis ojos estaban goteando, rápido los limpié.

—Realmente no quiero ser un entrometido, pero me preocupa un poco que no estés bien.

Sí eres un maldito entrometido, necesito que te vayas antes que me de otro ataque de ansiedad.

Y una vez más sentí comezón en las muñecas, no quería rascarme pero no podía evitarlo.

—Si necesitas hablar aquí estoy yo, papu.

De la nada escuché la puerta del baño abrir de golpe.

—Kiubo, Luisito. —escuché la voz de Raúl.

—Hola, papu.

—Escuché que te madreó el pana Miguel en básquet, JAJAJA, ¿cómo te vas a dejar así, men?

—Jeje, me tomó por sorpresa, no pensé que fuera tan bueno.

—Ps yo sabía que le gustaban los deportes pero no sabía que dejaba humillada a la gente.

Ya dejen de hablar de mí, carajo.

—Sí, y vi por qué no quería hacer equipo conmigo, jeje. En fin, me voy, quiero ver los otros equipos jugar.

—Chao, Luisi.

Escuché que el graso salió del baño y comencé a escuchar el agua del lavabo. Me levanté y salí del baño.

—Ah, Miguel, andabas de chismoso.

Sólo me quité los lentes y me lavé la cara antes que este kbron notara que estuve llorando, luego volví a ponerme los lentes.

—Hace tiempo no te veía sin lentes, te ves algo cansado, ¿haz dormido bien?

—Nunca.

—Otro chape te hará bien.

—Ya cállate, kbrón, si alguien más te escucha pensará otra mierda y contigo es con quien menos quiero problemas.

Sólo saqué un suspiro, realmente me sentía estresado ahora y que este kbrón me venga con sus homosexualidades era aún más cabreante.

—¿Pasó algo? Te ves más hecho mierda de lo normal.

Guardé silencio unos segundos y luego volví a rascar mis muñecas.

—Luis me vio sin los lentes.

—Ay no.

—Y el muy homosexual me dijo que tenía ojos bonito.

—Pos sí.

—Tú ni opines. Tú sabes cuánto odio esta puta mierda verde, y para rematar mis lentes se cayeron cuando todo el jodido salón estaba mirando.

Volví a rascar mis muñecas, comenzaron a arder pero la comezón era más fuerte.

—No creo que nadie se haya dado cuenta de tu ojito, tal vez sólo les haya sorprendido verte sin lentes.