15.

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Un silencio sepulcral reinaba en aquella habitación. Ambos se sentían incómodos, tenían mucho más por decir, tanto que querían saber o expresarle al otro, pero no, nada, solo se veían fijamente con los pensamientos perdidos.

Finalmente el albino reaccionó tomando la muñeca del azabache para guiarlo a la cama, ambos se sentaron en esta. Y como si nada hubiera pasado, Rius comenzó a limpiar las heridas y cambiar el parche del pecho del más alto.

Rius: pareces primerizo. Esta curación se te estaba infectando

Trolli: es que es difícil verla por completo

Rius: pues en la base ahí enfermería le hace presión al colocar el nuevo parche y ahí también estaba Yo

Trolli: agg! S-si...ya se

Rius: entonces?

Trolli: no soy bueno como tú con las palabras. Pero se que lo intuyes...

Un repentino color rojo se apoderó de ambos rostros. ¿Que debían decir? Trollino sabía aceptar sus sentimientos pero era alguien más de actos que palabras.

Por otro lado, Rius no tenía idea de que fuera verdad y ahora se debatía, si el también sentía algo por el azabache. No era mentira, le parecía atractivo y su convivencia había despertado la necesidad de estar más cerca de el, pero, ¿Esas eran razones suficientes? El echo de que se llevarán bien y se compaginaran tanto ¿Era una buena razón para aceptar sus sentimientos?

No pudo meditarlo tanto tiempo, ya que como se dijo, Trollino es un hombre de acciones~

Rius: e-espera!

Trolli: no quieres?

Había acercado repentinamente a su rostro, uno no retrocedía y el otro no avanzaba. Era respeto, Rius supo entonces que era su decisión y en un impulso junto sus labios con aquellos que rogaban su atención.

El ritmo era tan dulce, ambos cerraban los ojos creyendo que aún esto era solo un afortunado momento.

Las manos de trollino comenzaban a recorrer los hombros y espalda de Rius, quien respondía con ligeros espasmos en medio del beso que se hacía más acalorado.

Antes de proseguir, se separaron mirándose fijamente.

Tr: puedo?...

Los nervios invadieron a Rius, quien en lugar de dar una respuesta concreta a lo que sabía que el azabache pedía, simplemente se le subió en el regazo, despojandose de su propio saco y desabotonando su camisa.

Nada estaba escrito, no quiso aceptar ninguna responsabilidad y Trolli era consiente, pero tampoco pensaban detenerse a meditarlo.

El resto de las prendas fueron quitadas por el azabache, así como también la bata que le cubría a el. Rius se encargo de acomodarse en la cama mientras sentía cada vez más calor en su cuerpo, al ser observado por esos ojos azules  que parecían dejarlo más expuesto de lo que estaba.

Sin más palabras se unieron nuevamente a los besos, está vez más hambrientos, explotaban la cavidad del otro y jadeaban ante la falta de aire. Pero nada les impedía seguir~

Rius no podía creer que se sintiera así, cada estocada era un dulce elixir que recorría cada parte de su cuerpo, era como si Trolli tuviera todo bajo control, como si siempre le hubiera pertenecido ese cuerpo y sabía a la perfección como volverle loco.

Rius: ah!~ s-si un poco- MAS!

Su rostro estampado contra el colchón mientras era fuertemente sometido por esas manos que sostenían las suyas detras en su espalda. El azabache no decía nada, más no hacía falta, pues con los jadeos y gruñidos roncos que salían de su boca eran suficientes para deducir la lujuria que sentía en ese momento. El deleite en sus ojos podía transmitirse, ese deseo y una pizca de brillo singular no dejaban de hacer revolotear el corazón del albino al sentir esa penetrante mirada.

Fue una noche especial, era un momento realmente mágico donde ninguno pensaba en las consecuencias, en el futuro, no. Simplemente se volvieron uno y se entregaron por completo, por primera vez.

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Trolli: le pedí al jefe que no te arriesgará...

Rius: lo sé...era obvio

Trolli: no quería hacerte pasar por lo mismo que mis compañeros

Rius: el sabe?....sabe lo que sientes?

Trolli: lo sabe. Es por eso que me dio unas misiones más y podríamos ser libres

Aquella declaración impacto, tanto que salió rápidamente del comodo lugar en los brazos del azabache para mirarlo a los ojos sorprendido

Rius: dijiste que nadie salía

Trolli: si je...creí que me mataría cuando le pedí que salieras ileso, pero en cambio, me dio su bendición si le hacía unos trabajos peligroso

En un gesto lleno de gentileza y cariño beso el dorso de la mano albina para entrelazar sus dedos con ella. Apareciendo una brillante sonrisa que solo era opacada por el brillo de los zafiros de sus ojos.

Trolli: en dos semanas, seremos libres

Un cálido beso dejo como respuesta, aún no asimilaba todo lo que contenia esa decisión pero realmente deseaba comprenderlo.

Dejando sus pensamientos de lado, se quedó dormido en brazos de su acompañante, extasiado de felicidad, excelso de responsabilidad afectiva, simplemente tenía que seguir siendo el, no se había pedido nada a cambio y todo parecía estar resuelto.

"Claro...todo será perfecto apartir de ahora"

∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆

Ring ring!!!

3am ¿quien carajo llama a esta hora?

Y aún más extraño ¿quien podría llamar sino sus jefes?

- diga?

-R-rius? De verdad eres tú?






















Chan chan chaaaaaaan terminemos la historia antes de que Wattpad me borre todo qwq si alguien sabe a qué app nos mudamos me avisa porfa jeje gracias por leer y las personitas bellas que me esperan pacientes qwq las jamo graxz bye bye



Anécdotas de amor temporada 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora