Starr Park Academia [BS]

Capítulo 3

Capítulo 3 - Bufón

Colette y Janet llegaron a la cafetería con su comida. Cuando se sentaron, la albina avistó a un chico sentado en la mesa de al lado y se quedó observándolo.

No era muy alto, pero era bastante atractivo a los ojos de la chica. Su corto pelo rojizo, sus verdes ojos, las pecas que cubrían sus mejillas y la tirita bajo su ojo derecho... Todo era fabuloso en él según Colette.

-Tierra llamando a Colette... - Janet pasaba su mano arriba y abajo delante de la cara de su amiga, pero ésta estaba abobada mirando a aquel chico - Ya se me ha muerto la amiga.

-¿Eh, decías algo? - Colette finalmente volvió a la realidad

-Ya te has enamorado, ¿eh? - decía la pelirrosa con una sonrisa burlona

-Es que es tan... - la albina se sonrojó

Justo cuando se acabaron la última patata frita de la bolsa, sonó un mensaje por megafonía.

-Los 30 minutos han finalizado. Por favor, que todo el alumnado se dirija a sus respectivas clases. - decía

★★★

-¿¡QUÉ!? ¿¡TAN RÁPIDO!? - exclamaba Max, teniéndose que despedir de Surge

-Bueno, después de todo sólo eran 30 minutos - decía Surge sonriendo, mientras se rascaba la nuca -. Agradece que al menos hayamos tenido algo de tiempo antes de comenzar.

-Bueno, supongo que tienes razón.

-Oh, se me olvidó preguntarte algo - dijo el rubio -. ¿Cómo está tu hermana? No la he visto...

-¿Meg? Está enferma - soltó Max -. No ha podido venir hoy, pero creo que pronto vendrá.

-Bueno, que se mejore - decía él sonriente, sacudiendo su mano para despedirse -. ¡Adiós, Max!

-¡Adiós! - exclamó, hasta que el chico se fue - Adiós...

★★★

Todos los alumnos y profesores estaban entrando en sus respectivas aulas.

La clase de cuarto fue una de las que menos tardó en llenarse.

-Oh, ¿esta será nuestra aula? - Colette admiraba todas las paredes, mesas y sillas de la clase - ¡Genial!

Unas risas se escucharon de fondo.

-¿Genial? - Lola, la tutora de cuarto, habló - Cariño, yo a tu edad tenía ganas de morirme al ver una clase.

-¡Yo ya tengo ganas de morirme! - exclamó un pelirrojo al fondo de la clase

-No digas eso, esta vez la clase no es tan mala - decía Lola tranquila -, ¡estoy yo!

La profesora rió, pero su risa paró al escuchar hablar a ese pelirrojo de antes.

-Pues justamente tenía ganas de morirme por ver tu carota, tan feúcha - se escucharon las risas de fondo de todos los que estaban en la clase. Lola miró al alumno con ojos llenos de ira -. Vamos profe, no te enfades, era una bromita.