Capítulo 20

14 6 1
                                    

-Y es por eso que te digo, Angolud embarazó a Jeas. - le puse un ganchito en el pelo.

-¿Y tú cómo sabes eso? - me apretó ligeramente la cintura.

Agarré otro ganchito y un mechón de pelo para amarrarlo.

-Eider.

-Claro. ¿Y quiénes son ellos? - me atrajo más a él haciendo que mueva mi trasero.

-La hija del panadero y el carpintero. - le doy un beso en la mejilla.

-¿Un hombre mayor es el carpintero? - sus manos fueron a mis caderas.

-No tanto sinceramente. El carpintero tiene treinta y la hija por mi edad o menos pero es mayor de dieciocho. - le doy otro beso pero esta vez a la otra mejilla.

Haslam dijo una exclamación de sorpresa y realizó una pequeña o con su boca.

-No, no los conozco pero buen chisme.

Los dos nos reímos y puse mi frente en la suya teniendo una pequeña sonrisa en los labios.

-Bienvenido a Brusley.

-Me gusta mucho la frase que hay en la cadenita. - lo miré confundida, hasta ahora me lo dice y ya vamos por el tercer mes juntos, sin más él aprovechó ese momento para besarme.

Un beso lento y suave que transmitía mucho.

-Sé que no te recuerdo mucho, mejor dicho casi nada. - él soltó una suave y pequeña risa. - Pero tengo pequeñas lagunas sobre un niño con más o menos con tu físico pero pequeñitas muy pequeñitas.

-¿Y estás segura que soy yo? ¿O será otro pequeño mocoso que te quería conquistar eh? - puso su cara en mi cuello dándome pequeñas cosquillas que me hacían estremecer mi cuerpo.

Se separó cuando se dió por satisfecho.

-Posiblemente, ¿Quién sabe? - le seguí el juego.

-Pero nadie te amaría más que yo. - habló un poco ofendido. Puso un mechón de mi cabello detrás de mí oreja. - Eres muy bonita... Más si estás encima de mí. - esas últimas palabras lo dijo muy bajo que casi no le pude escuchar.

-¿Qué dijiste?

-¿Qué de qué?

-Hace unos segundos, ¿Qué dijiste? - puse mis manos en sus hombros.

-Dije que eras muy bonita. - se hizo el inocente.

-¿Quieres que te diga que fue lo que escuché? - acerqué mi rostro hasta estar a milímetros del suyo.

Pude notar como se sonrojó un poco mirándome los labios y luego volvieron a mis ojos.

Tragó saliva fuertemente tratando de quitarme de encima pero no dejé que me sacara de esta posición estando cómoda.

-Yo... - carraspeó nervioso. - Yo no dije nada.

-Sí, si dijiste algo que apenas oí, pero quiero que salga de nuevo de tu boca.

Su respiración y la mía chocaban entre sí.

-Si has escuchado porque no me lo dices tú. - susurró, él ya no estaba nervioso ni tenía las mejillas sonrojadas, de hecho apretó más mis caderas acercándome aún más a él.

Ahora yo soy la que está nerviosa y traga saliva con fuerza.

Lo odio por intercambiar los papeles.

Aún así hablé fuerte y claro como si no hubiera nerviosismo en mi sistema.

-Lo que oí fue... - puse mi boca en su oreja. - Que me veía muy bonita encima de ti. - susurré mordiendo su lóbulo de la oreja y dando pequeños besos en su mandíbula y cuello.

OK: ESTÁ BIEN [BORRADOR]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora