Sweatshirt (sudadera) +18

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-¿Me lo compras?- Lara hacia pucheros, habíamos pasado todo el día caminando por el pueblo y ella cada cosa tierna que veía quería comprarlo.

-¿Qué es ahor...?- Le pregunto girandome y observando los anillos que me mostraba.- Lara... son de pareja, ¿para que los quieres?

-Aquí no dice que son únicamente para parejas... tampoco dice que son para parejas de novios. Podríamos usarlos tu y yo como anillos de pareja de amigos.- Me sonrie inocente, eran dos alianzas super delicadas.- Nos las pueden grabar por dentro y podríamos poner esta fecha como el día que decidimos ser libres.- Me sonríe y no puedo negarme.

-Bien, ve a pedir que los graben. Yo los pago.- Le digo girandome nuevamente a ver las cadenas, sabía que no iba a usar el anillo en mi mano porque me queda incómodo, así que decidí usarlo en una cadena.

-Gracias Chris.- Besó mi mejilla y corrió a la caja para pedir que le graben los anillos.

Me quedé paralizado y sonrojado, esa chica me movía todo el mundo y me encantaba, tomé la cadena que me gustó y luego de calmar mi corazón me acerqué a ella.

-¿Ya pediste lo que querías poner?- Le pregunto mirando a Lara y poniendo mi mano en su cadera como de costumbre.

-Mhmm, el mio además va a llevar tu nombre y el tuyo el mio.- Me sonríe inocentemente.

-Son una pareja adorable.- Menciona la anciana que atendía el negocio.- Les deseo mucho amor, prosperidad, éxito y muchos pero muchos hijitos.

Iba a negar la afirmación de nosotros como pareja pero Lara se adelantó a hablar.

-Señora, le agradecemos todos sus buenos deseos, pero el último será imposible si mi querido novio no se anima.- Ríe y yo me sonrojo al extremo.

-Mon chéri... Pagaré todo esto y te esperare afuera, siento mucho calor.- Le digo dejando el dinero de las compras sobre el mostrador y casi corriendo al exterior de la tienda.- ¿Qué fue todo eso?- Me pregunto a mi mismo respirando con mayor calma.

Veo un banco junto a la tienda y me siento, con la cabeza entre las manos y tratando de pensar un poco en la reacción de Lara, ella siempre fue de bromear conmigo, pero jamás fingir delante de otros que eramos novios. Mi corazón latía desbocado y mis mejillas ardían por el calor que subía desde mi interior. ¿Por qué actuó así? ¿Será que me escuchó decirle eso a Felix? No creo, debió de estar con poco sonido desde el baño, no se escucha nada cuando te duchas. Me hago esas preguntas internamente hasta que algo se interpone en mi visual.

-Olvidaste esto...- Lara me sonríe sosteniendo el collar ya con el anillo puesto a modo de dije, veo la inscripción con delicadeza y nuevamente mis mejillas se sonrojan.

-G-gracias...- Tartamudeo por primera vez en mucho tiempo. Hago el intento de ponérmelo pero no lo consigo, es por eso que Lara de forma silenciosa me pone el collar y luego deja un beso en mi nuca.

-Gracias por cumplirme un capricho.- Me dice con cariño y me enseña su anillo en el dedo anular derecho.- La señora creyó esquemas estábamos casados.- Se ríe y yo me río con ella también.- No es la primera vez que me dicen que tu y yo hacemos una linda pareja.

La miro sorprendido. Ella miraba a las montañas perdida en sus pensamientos.

-Lara...- Comienzo queriendo decirle mi opinión, pero ella me sorprende poniéndose de pie y extendiéndome su mano.

-Tengo hambre, ¿vamos a cenar en ese restaurante con jardín que vimos unas calles más arriba?- Me pregunta sonriendo.

No dudo en mirar su mano, luego su rostro y sonreírle asintiendo con la cabeza mientras tomo su mano y comenzamos a caminar juntos.

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-Jisung dice que extraña comer con nosotros y que Changbin es buen cocinero.- Menciona Lara riendo y mostrándome la fotografía del plato de carne que cocinó Changbin.

-Es tan buen cocinero que siempre prefiere que cocines tu.- Me río y llevo un poco de mi pasta a mi boca.

-Pero yo cocino mejor que él.- Se ríe Lara mientras les envía una foto de nuestra cena a los chicos.

La miro mientras mastico tranquilamente, es tan hermosa al natural que mi corazón no puede evitar acelerarse, la imagino realmente como mi esposa en un futuro, saliendo a cenar celebrando nuestras fechas y eventos importantes o simplemente saliendo porque queremos hacer algo diferente. No soy consciente de cuanto tiempo paso observándola hasta que ella sacude su mano delante de mis ojos.

-Chan... ¿En qué piensas?- Me pregunta con calma.

-En nada, solo disfrutaba de verte alegre.- Le sonrío y sigo comiendo tranquilamente.

Al regresar a la habitación ella se deja caer de espaldas en la cama, yo me meto en el baño a cepillarme los dientes y ponerme el pijama, al salir la veo casi dormida por lo que me tiro sobre ella y sonrío.

-Ve a lavarte los dientes...- Le digo riendo mientras le hago pequeñas cosquillas en sus costados, ella ríe y yo río con ella. 

-Salte de encima, sino no puedo ir.- Me dice entre risas intentando empujarme, pero es ahí cuando soy consciente de lo cerca que estamos, ambos nos miramos a los ojos y puedo ver como sus mejillas se comienzan a teñir de rojo.- Ch...

-Me gustas... estoy enamorado de ti desde primer año. Sé que no es el momento, pero quería decírtelo, no soportaba más.- Le digo sin poder contenerme.

Ella me mira, su expresión es difícil de leer, pero su siguiente movimiento me paraliza, me besa, ella me besa mientras sostiene mi nuca. No puedo evitar continuar el beso y tomarla entre mis brazos. Todavía siento el sabor del helado de vainilla que comió de postre y como se mezcla con el sabor a menta de mi pasta de dientes. Jadeo cuando siento que el beso se vuelve más intenso y ella me deja paso a introducir mi lengua en su boca para hacer el beso más íntimo. 

Cuando el aire nos falta nos separamos y nos miramos de frente.

-Ya sabía que estabas enamorado de mi, pero la forma en la que se lo hiciste saber a Felix fue lo que me hizo entenderlo del todo.- Dice Lara sorprendiéndome.

-¿L...lo escuchaste?- Le pregunto sonrojado.

-Claro, escuché todo, estabas gritando junto a la puerta del baño.- Dice riendo.- Tú también me gustas, solo que me costó reconocerlo, por eso cuando ocurrió lo de Felix, si bien me dolió, rápidamente dejó de hacerlo, porque te tenía a ti a mi lado para apoyarme. Eres todo para mi, me enamoré de ti sin darme cuenta y eso es lo más hermoso que me ha pasado en la vida. 

Sonrío y la vuelvo a besar con amor, intentando transmitirle todo lo que sentía con solo ese beso que cada vez era más intenso.