7: Las puertas del alma

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Tras una semana de la boda real, el príncipe miraba por el balcón de la habitación en donde solía irse a leer siendo acompañado de su leal caballero.

Miraba a su ahora esposa estar en uno de los jardines junto con su hermano para darse una larga despedida.



– No logro hacerlo. – confesó finalmente el azulado aun sin dejar de ver a su esposa – Ni siquiera haber tomado tanto vino me ayudó en el día de la boda.

– Nadie dijo que sería fácil para ti. – decía su caballero quien estaba sentado en una de las sillas.

– ... Sí. – suspiraba desviando la mirada – Solo tiene 18 años. ¿Hasta cuándo tiene que continuar este tipo de tradiciones? – miraba al caballero – Dejar los matrimonios forzados...

– Eres de la realeza, Sonic. – lo miraba – El deber de la realeza es casarse con alguien más de su mismo status.

– Lo sé... – suspiraba frotándose la cara – Esto está siendo más complicado de lo que esperaba.

– ¿Qué esperabas, azul? – reía ligeramente.

– Oye... – se le formaba una gran sonrisa en su rostro – ¡Hey! Encontré una solución para el embarazo. – miraba a su caballero.

– ¿Cuál?

– ¿Cómo no se me ocurrió desde el primer día en que lo vi? – se burlaba de sí mismo – Puedo hablar con Jehan o hacer lo que sea para que él la embarace.

– ¿Qué estás...? – fruncía el ceño.

– Él podrá ayudarme con este lio. – sonreía con total seguridad.

– Sonic, ¿Te estás escuchando? – cuestionaba con mucha seriedad – ¿Cómo vas a pedirle a él que la embarace? Además, provocarás que ella corra el riesgo y será nombrada de formas que la deshonrarán.

– No lo notará nadie. – miraba al caballero – Yo mismo me voy a encargar de eso.

– ¿Y si el hijo se parece a Jehan? – cuestionaba nuevamente – ¿Si en lugar de salir blanco con café o completamente azul, sale rojo? En ninguna familia ha habido el color rojo.

– O si tiene los ojos azules... Nadie tiene ojos azules. – suspiraba desviando la mirada.



El caballero suspiró ligeramente, se puso de pie y se acercó hasta donde estaba su amado príncipe para tomarlo de la mano.



– Sonic. – se miraban – Tendrás que hacer esto de una forma u otra, al igual que tienes que hacerlo lo más rápido posible. Los murmullos ya comienzan a esparcirse al saber que la princesa no se ha embarazado después de una semana se haberse casado.

– Si, lo sé – desviaba la mirada – Shads, ¿No vas a enfadarte con todo eso?

– Ya te lo dije, es tu deber como príncipe y futuro rey. No tengo porqué molestarme. – suspiraba ligeramente – Ambos sabíamos que esto iba a suceder.

– Aún con todo esto – miraba a su caballero –, ¿Quisieras continuar con nuestro romance?

– Estoy dispuesto a todo lo que sea contigo, siempre y cuando tú quieras lo mismo.

– Siempre seguiré estar haciendo esto solamente contigo. – sonreía mientras se sentaba en las piernas de su amado quedando cara a cara – No seré de nadie más... Soy completamente tuyo. – ambos se miraban fijamente mientras tomaba el rostro de su caballero – Completamente tuyo soy hasta dar mi último suspiro y mis huesos se hagan cenizas.



Se acercó a su caballero y lo besó de forma tan apasionante, las manos juguetonas de ambos recorriendo el cuerpo del contrario y apegando lo más que podían sus cuerpos.

Secretos tras la corona ~ ShadonicDonde viven las historias. Descúbrelo ahora