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Cuando Jeongyeon llegó al punto de reunión se sorprendió de ver sola a la contraria ahí.

—¿Dónde está Sana?— Fue lo primero que preguntó, pues Tzuyu jamás salía sin ella.

—En casa— Respondió sin ánimos la otra —Es por eso que quería hablar contigo.

Y fue entonces que Jeongyeon notó lo que pasaba, pues lo ojos llorosos de Tzuyu lo decían todo.

Entonces pasaron a la tienda de conveniencia en donde habían acordado verse y después de comprar unos cafés fueron a una mesa para poder hablar sobre el asunto que la menor necesitaba resolver.

—Y bien, ¿Por qué estamos aquí?— Jeongyeon fue directa.

—Necesitaba hablar contigo— Sin embargo, Tzuyu aún tenía miedo de quebrarse.

—¿Por qué no está tu esposa contigo?

Un suspiro de derrota fue suficiente para saber que Tzuyu había dejado caer todas sus barreras.

—Me salí de la reunión después de discutir con ella— Explicó a grandes rasgos —Y sinceramente no quiero volver a casa... Al menos no por esta noche.

—¿De qué estas hablando Chou? Ustedes siempre han sido inseparables.

—No lo creo Jeong, desde que notamos que Sana tenía dificultades con sus embarazos los problemas solo han ido incrementando — Lágrimas comenzaron a formarse en los ojos de Tzuyu —Nuestro último bebé tampoco lo logró.

—No— Jeongyeon soltó un suspiro de tristeza.

A decir verdad Jeongyeon tenía algo de esperanzas en este último embarazo, pues el bebé anterior había durado 8 meses en el vientre de Sana siendo el embarazo que mejor había llevado, entonces esperaba que este finalmente lograra nacer, pero, por desgracia incluso había tardado menos tiempo.

Tzuyu solamente asintió varias veces antes de seguir hablando.

—Tenía todas mis esperanzas en este embarazo, pero, esto solo me confirma lo obvio, Sana no puede mantener sus embarazos— Tzuyu finalmente lo admitió y comenzó a llorar —Me duele, realmente me lastima haber perdido tantos, sabes que queremos ser mamás con todo nuestro corazón— Ella siguió llorando —Pero, ¿Sabes qué es lo que más me duele? Que Sana no confíe en mí para dejarme llevar a uno en el vientre.

—Creí que tú eras quien no quería embarazarse— Jeongyeon estaba algo confundida.

—No quería, pero después de todo lo que ha pasado con Sana incluso le ofrecí intentarlo conmigo, pero, ella se negó rotundamente, prefiere seguir perdiendo bebés en lugar de renunciar a parir y me estoy cansando de esto— Tzuyu hablaba con lágrimas bajando violentamente de sus ojos —Siento que ya ni siquiera podemos ser felices con nuestra relación, todo el tiempo estamos llorando o discutiendo y ya no quiero estar así con ella— Hizo una pausa —Y si las cosas no mejoran creo que ya no quiero estar con ella.

—Cierra la boca, Chou Tzuyu— Era la primera vez que Jeongyeon le hablaba de esa manera —No vuelvas a decir algo como eso— Jeongyeon pidió con los ojos bien abiertos, pues en estos momentos ella no estaba actuando como su psicóloga, sino como su amiga.

—Se ha vuelto demasiado, Jeongyeon, ella era mi lugar seguro, pero, ya ni siquiera podemos estar en paz.

—Piensa bien la cosas, mujer, esto es solo un mal momento, por supuesto que no quieres estar lejos de ella— Jeongyeon intentaba desesperada hacer a la menor entrar en razón —Solo piensa en ese momento cuando ibas a perderla, dijiste que nunca la dejarías sola y que siempre estarías a su lado, ¿Lo recuerdas?

EL CLUB DE SUPERACIÓN || 2YEONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora