CAPÍTULO 26. Eres Mi Joya

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Región de Lanling. Torre de la Carpa Dorada.

Llegaron cuando aún era de día, aún quedaban unas cuatro horas de buena luz así que habían llegado según lo planeado. Al entrar a la ciudad previa a la Torre de la Carpa Dorada pudo escuchar el ambiente de fiesta y celebración por la boda que su hermana de crianza tendría con el líder Jin Zixuan.

El invierno había terminado y la primavera comenzaba a mostrarse en las distintas regiones, aún quedaban algunas nieves en las altas montañas de Gusu pero en cuanto comenzaron a llegar a Lanling el calor y el verdor eran visibles por todas partes.

Mo Xuanyu: ¿Cómo te sientes A-Ying?

La voz de su gemelo lo sacó de sus pensamientos, Xuanyu iba a su lado en un cómodo carruaje techado, habían decidido hacer un viaje normal y no sobrevolar en sus espadas porque todavía no se sentía cómodo utilizando su cultivación.

Wei Ying: Estoy bien.

Mo le tomó de la muñeca para examinarlo con su poder de sanación, el calor de esa energía era reconfortante porque podía sentir las emociones de su hermano, su preocupación y cariño.

Wei Ying: Te dije que estoy bien A-Yu - Apartó la mano con suavidad y le acarició la cabeza dándole una pequeña sonrisa - El viaje fue bastante cómodo y no me siento cansado.

Mo Xuanyu: ¿En serio?... podemos parar a descansar en la posada y comer algo.

Sólo ellos iban dentro del carruaje, rodeados un pequeño grupo de cultivadores, entre los cuales estaban sus guardianes y por supuesto los Jades de Gusu. Y al parecer su conversación llamó la atención de uno de ellos porque el carro se detuvo, el toldo delantero se corrió y Lan Zhan se asomó.

Lan Zhan: ¿Necesitas descansar? - Susurró mirándolo directamente.

Wei Ying: No... prefiero llegar a la Torre de la Carpa Dorada lo más pronto posible... ya descansaremos después de saludar a Jin Zixuan y a mi jiejie.

Lan Zhan: Hn - Asintió para regresar el toldo a su lugar y dejarlos nuevamente solos.

Mo Xuanyu: Creo que nos miman demasiado - Se ríe levemente - Pero no me quejo.

Wei Ying: Igual es extraño... tanta tranquilidad parece tan rara ahora - Apartó el cobertor de la ventana a su derecha para ver la ciudad - Supongo que volverme humano tiene sus ventajas - Se lleva una mano al pecho - Aunque sigue sintiéndose extraño... como si algo importante me faltara.

Mo Xuanyu: Necesitas tiempo - Le toma de la mano - Pero recuerda que no estás sólo Didi.

Eso era verdad, desde que se había sincerado con Lan Zhan y pedido perdón a su hermano una tranquilidad se había instalado en su corazón, había podido dormir sin tener pesadillas por primera vez desde ese momento y su recuperación había comenzado.

En Silent Room las cosas se habían vuelto más relajadas, ahora desayunaba junto con Lan Zhan, por las tardes cuando su Jade tocaba el Guqin él se sentaba en el salón en postura de meditación para ponerse en contacto con su cultivación u otras veces tomaba sus cuadernos para dibujar, su hermano había mandado a traer todo lo que pudiera necesitar pero no lo había tocado hasta ese momento.

Cuando Lan Zhan tenía que hacer alguna cosa para el Clan prefería salir e ir con su hermano para ayudarle, mantenerse ocupado tranquilizaba su corazón y lo mantenía tranquilo, porque la soledad sólo le traía la sensación de ausencia de su Nüwa y el dolor regresaba.

Continuaron a buen ritmo y en poco tiempo el carruaje volvió a detenerse, por la ventana se dio cuenta que habían llegado a su destino. Por fuera pudo notar que había todo un grupo esperando por ellos, entre cultivadores, soldados comunes y el líder Jin junto con su hermana.

LA JOYA DEL JADEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora