𝐖𝐃 | Nada dura por siempre, aquello incluye a los amores, ¿pero que pasa si deseo que lo nuestro si sea eterno?
Ruby vogrincic comienza a enamorarse de la persona más inesperada, uno de los amigos de su hermano, ¿Qué tan bien podría terminar es...
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#AGUSTÍN
RUBY SACABA FOTO a todo lo que se cruzaba, algo de su hermano había heredado, ambos eran aficionados a la fotografía y nadie podía sacarles eso.
Observaba su rostro lleno de emoción por cada resultado de cada foto, de ella se desprendía solo buena vibra, una vibra que quien la viera se contagiaba de manera automática.
Podría jurar que algún día será una buena fotógrafa, es su camino, su destino.
El transcurso del día fue algo corto, paseábamos y recorriamos pinamar, Enzo y Ruby sacando fotos, Juani y Fran molestandose entre sí cada que podían.
La alegría de verano.
Que el tiempo pase viéndonos reír, después de todo, nunca volveremos a ser tan jóvenes como hoy, nunca disfrutaremos de esta forma un verano en compañía de amigos.
Llegamos a la casa con cansancio sobre los hombros, ninguno tenía muchas ganas de siquiera cocinar.
Fran fue el único que se propuso a colaborar con aquella tarea, y agradecimos, Fran era de los pocos que cocinaba bien.
Demasiado, para ser sinceros.
Ruby sube a la habitación sin decir nada, nadie parece darse cuenta y aunque yo si, ignoro aquel hecho mientras río al ver como empiezan a tirarse a la pileta, se empujan unos a otros y decido unirme a aquel recuerdo.
Porque en eso se convertirían algún día, en tiernos recuerdos.
Unos que atesoraremos, que recordaremos y sentiremos el deseo de volver a vivirlos.
Era de noche, risas era lo único que podía oírse en ese patio.
El ruido del agua, risas, felicidad.
Miro para el lado de la escalera, Ruby baja en un bikini negro, distintas tiras del mismo rodean su cintura.
Cuando la vi sentí algo raro por dentro, una mezcla de miedo con locura.
Siento como tiran mi cuerpo de un lado a otro pero ignoro fácilmente eso, mis ojos solo observan a la rubia de bikini negro.
Mi cuerpo se hunde bajo el agua, uno de los chicos me ahogaba.
Caigo en cuenta de la situación y vuelvo a la superficie jugueteando nuevamente con los chicos.
Aunque intentara negarlo, sabia que observaba atentamente a Ruby.
