Trunks se encontraba trabajando... Bueno... No precisamente...
Estaba en su oficina y era horario laboral, pero dejó de revisar los documentos de la Corporación Capsula que estaba viendo para leer un correo que le había llegado. Ya no creía que pudiese concentrarse por el resto del día. Contento, se levantó de su asiento para ir a buscar a Bulma en otra de las oficinas. Al llegar, notó que la puerta de vidrio estaba abierta, pero a pesar de eso tocó la puerta para llamar su atención.
"¿Trunks?"
"Mamá... me aceptaron en el diplomado empresarial." Le informó a la mujer, quien rápidamente se acercó a él para abrazarlo.
"Me alegro mucho por ti, cariño... Aunque estaba segura que te aceptarían." El pelilila no pudo evitar voltear los ojos ante su comentario. "¿Te lo dije o no?"
"Sí, mamá." No iba discutir con su madre por idioteces... ¡Lo habían aceptado!
"Deja el trabajo por hoy y vamos a festejar." Trunks estaba indeciso. Por una parte, sabía que no podría concentrarse adecuadamente, pero por otra no se sentía correcto simplemente cerrar por el día. Bulma, como si hubiese leído su mente, volvió a hablar. "Trunks, no va a pasar nada por que te tomes un día." A regañadientes, accedió y partió a ordenar su escritorio para poder retirarse con un ligero sentimiento de culpa.
El pelilila sabía que su madre tenía una habilidad de poder hacer que las cosas ocurran, es algo que siempre admiró y envidió de ella. Sin embargo, esto... era derechamente ridículo...
"¡FELICITACIONEEEEES!" El grito colectivo con el que fue recibido en su casa lo sorprendió. Se fijó mejor en la habitación, y estaba su padre sosteniendo a su hermana junto a casi todos los guerreros Z con sus familias, mientras el lugar estaba decorado y había un enorme pastel en medio de la sala.
"¿Cómo hiciste esto en tan poco tiempo?" Cuestionó el joven a Bulma, la que solo lo miró con un gesto de superioridad.
"Tengo mis métodos..." Dicho esto, la mujer se adentró en su casa.
"¡Trunks!" Ante el llamado, el pelilila volteó a ver a Goten sonriéndole ampliamente. Su pareja se acercó a él y lo abrazó con fuerza. "Felicitaciones." Susurró el castaño antes de darle un rápido beso en la mejilla para después separarse un poco de él.
"Gracias, Goten." Ver la hermosa sonrisa en el rostro del menor hacía que quisiera besarlo por un largo rato. Sin embargo, estaba en público. Ya tendría tiempo más tarde para poder intimar con el muchacho.
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Después de la fiesta en la casa de Bulma, todos se retiraron, excepto la familia Briefs y Goten. Esto no era extraño. El menor de los Son, al ser el novio de Trunks, pasaba varias noches ahí.
Ellos habían comenzado una relación siendo adolescentes, por lo que Milk era muy estricta respecto a limitar sus momentos a solas. Lo que Milk no sabía, era que tanto Bulma como Vegeta encontraban que era ridículo controlarlos, por lo que pasaban la mayor parte de su tiempo en la Corporación Capsula y la peliazul de vez en cuando los encubría para que la sobreprotectora madre del pelinegro no hiciera un espectáculo.
