¡Sorpresa!

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Konoha, aldea oculta entre las hojas, 16:28 p.m.

—Verán... es algo obvio, ¿no? —dijo Naruto, mirando a todos con una sonrisa traviesa.

—Es decir, hay que ser un tonto para no darse cuenta —añadió Naruto, encogiéndose de hombros.

Tsunade observó a Naruto con curiosidad.

—Ya, ya, ya... ya me estoy enterando, pero me refiero a, ¿desde cuándo lo sabes y cómo lo descubriste? —preguntó Tsunade, mientras se recostaba en su silla.

—Voy por partes, abuela —suspiró Naruto antes de continuar con su monólogo—. Fue cuando tenía 8 años. En clase nos estaban enseñando sobre la historia de los Hokages de Konoha, ya saben, lo típico —dijo Naruto, levantándose de su asiento.

Naruto pensó un momento, buscando las palabras adecuadas.

—Esa clase en particular fue de las pocas que realmente me llamó la atención. Así que, por primera y única vez en toda mi travesía en la academia, abrí el libro para seguir la clase —dijo Naruto, pasando una mano por detrás de su cabeza—. Fuimos estudiando a cada uno de los 4 Hokages: su vida, cómo llegaron a ser Hokages, cómo murieron, sus familiares y esas cosas.

—Y así pasamos por uno a uno: el primero, el segundo, el tercero... hasta llegar al cuarto. Al principio, al leer un poco de su historia y ver las fotos en el libro, no pude evitar notar el gran parecido entre él y yo. Pero decidí dejarlo como una simple coincidencia —dijo Naruto con aire despreocupado.

—Pero luego, cuando leí más sobre su historia, llegué a una parte interesante. Su esposa, al parecer, se llamaba Kushina Uzumaki. Y ahí fue cuando mis sospechas aumentaron —dijo Naruto, con un tono más serio.

Hizo una pausa para continuar con su relato.

—El apellido de la esposa del cuarto Hokage era el mismo que el mío. En ese momento, pensé que ya era demasiada casualidad. Al terminar las clases, seguía pensando en lo que había visto —Naruto volvió a levantarse de su asiento.

—Así que decidí investigar un poco más sobre el clan Uzumaki. Me dirigí rápidamente a la biblioteca y comencé a buscar libros sobre los clanes de Konoha. Leí varios, pero ninguno decía mucho sobre el clan Uzumaki —se acercó a la ventana y miró hacia afuera—. Pero no me iba a dar por vencido tan fácilmente. Seguí buscando, libro tras libro, hasta que finalmente encontré uno que hablaba mucho sobre el clan Uzumaki: fuertes guerreros expertos en sellos, conocidos por su cabello rojo.

Naruto miró a Tsunade, como si la historia ya estuviera tomando forma.

—El libro hablaba de cómo todas las naciones temían a este clan, ya sea por sus poderosos sellos o por su monstruoso chakra. Eso fue otra señal para mí, porque yo tenía chakra de sobra. Así que eso me dejó con más sospechas —dijo Naruto, mirando fijamente a Tsunade.

—También mencionaba cómo las naciones se unieron para destruir a este clan. Pero lo que realmente me hizo darme cuenta fue lo que hablaba sobre Konoha. Las únicas dos Uzumaki en la historia de Konoha eran Mito Uzumaki y Kushina Uzumaki —Naruto regresó a su asiento.

—Ahí fue cuando mi mente hizo clic. Era obvio, no había posibilidad de que yo tuviera algo que ver con Mito, pero por otro lado, Kushina coincidía en todo: fechas, lugares... —Naruto se encogió de hombros.

Mi rayo de sol (Naruto x Temari)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora