Una Última Oportunidad. (Sasusaku)

Capítulo II. Otro Dia Sin Saber Lo Que Realmente Sientes.

Tanto Naruto como yo terminamos de cenar, y el héroe de la villa me acompañó de regreso a casa. Durante toda la noche no deje de pensar en cómo sería todo si Itachi no se hubiera ido, si no hubiera asesinado al clan Uchiha, si la aldea no hubiera conspirado contra ellos. ¿Cómo sería la vida de Sasuke?, esta más que claro que no tendría toda esa obscuridad en su corazón, pues probablemente no se habría ido con Orochimaru. Pero nada de eso tiene sentido, pues son añoranzas del pasado.
Ahora Sasuke es lo que es y nada puede cambiar su pasado, pero, ¿Será posible cambiar su futuro?
No dormí lo suficiente, pues todas esas preguntas me rondaron la cabeza por un buen rato, y me quedé dormida justo antes de que saliera el sol.
Me prepare el almuerzo y salí directo al hospital, tenía demasiado que hacer, cuando llegue al cuarto de mi primer paciente me encontré con Lady Tsunade.
- Ah, Sakura, ahí estas.
- Buenos días, shishou.
- Te he estado buscando, necesito pedirte un favor.
- Claro, digame que debo hacer.
- Escucha, se que últimamente has estado muy atareada con todos aquí en el hospital, pero se te nota cansada, y sabes que eso no es bueno. Además alguien me dijo que no comes mucho.
- Asi que vino Naruto.
- Escucha, el esta preocupado por ti, y la verdad es que yo también. Debes tomarte unos días de descanso. Será bueno para tu salud. Además es una orden.
- Pero Lady Tsuna...
- No me repiques, es una orden del Hokage.
Fruncí el seño, pero no podía pelear con mi maestra. Abatida, recogí mis cosas y salí del hospital.

Caminé un rato por la villa, y decidí que podría ir a ver a Ino, incluso ir por una taza de té. Llegué a la floreria y ahi estaba mi mejor amiga, con su larga cabellera amarilla, y su atractivo cuerpo atendiendo a un par de jóvenes que seguramente estaban interesados en ella, mas que en las flores.
Cuando terminó de atender, me acerque a saludar.
- Hola Ino, ¿como estas hoy?
- Sakura, hola, ya tenía mucho tiempo sin verte, ¿Cómo has estado?, dejame decirte que yo estoy de maravilla.
- Pues bien, supongo.
El ver a Ino feliz no era algo sobrenatural, pero por lo general no era tan entusiasta, debo admitir que su felicidad era pegajosa.
Era notable que algo bueno estaba pasando por sus días.
- Vamos adentro, te invito un té, hay tanto que quiero contarte.
Después de un rato de charlas sin sentido, me enteré que Sai había comprado un libro para aprender a cortejar y según lo que entendí, usa a Ino como conejillo de indias, y al parecer a ella no le desagrada este en absoluto. Por una parte me siento muy feliz, ya que ella ha encontrado alguien con quien compartir su futuro, sus experiencias, toda una vida, y por otro lado, me siento feliz de que ella ya no esté interesada en Sasuke, si suena demasiado insegura de mi misma, pero es lo que siento.
Me despedí de ella y caminé sin rumbo fijo, pues no quería llegar a casa temprano y que mamá comenzará a fastidiar con que hiciera mis deberes.
Sin darme cuenta, terminé justo en la academia ninja, el lugar en el que todo había comenzado. Ahí los conocí a ellos, a mis compañeros de equipo. Siempre quise que me notaran .
Por un momento, me quedé ahí, viendo mis antiguas lecciones, impartidas por Iruka con todos mis compañeros ahí, recorde a Naruto, siempre intentando llamar la atención, y arruinandolo todo. Y recorde a Sasuke, tan callado, tan buen ninja, tan perfecto. De pronto sentí que alguien estaba parado detrás de mi, y cuando me gire, me encontré con unos ojos rojos y un cabello negro azabache, esos mismos ojos y ese cabello con el que había soñado, dormida y despierta.
- Sakura... Yo, lo siento.
- Sa... Sasuke-kun

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Hola otra vez, muchas gracias por leer. Perdón por las faltas de ortografía, pero intentaré mejorarlas, déjenme sus comentarios, se agradecen mucho. :)
Subire capítulo todos los días por las noches o al menos lo intentaré.
Bye, los quiero ñ.ñ
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