Capítulo 44: Ya es tarde - Rompiendo Cadenas

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Un joven de mirada fría detenía su auto frente a una emisora radial, tras algunos minutos dentro del mismo, decidió bajar y caminar a paso firme hacia el edificio.

Su identificación, ¡por favor! decía un tanto temeroso un uniformado.

Black de mala gana le entrego la misma, mientras observaba el lugar, al tiempo que pensaba: Maldito gusano, es que no entiendes que te quiero lejos de mi mujer.

Tome joven, escucho, seguido de: ¿A quién busca?

A la señorita Cirys....

En tanto:

¿Black?, expresaba la peliroja.

Si señorita, ese es el nombre que me dio, escucho.

Dile que me espere....

Cirys, no soy un extraño, permite la entrada, escucho.

Bien, déjalo subir, expreso la peliroja, mientras se ponía de pie, para ir a darle el encuentro a su ex y amigo.

Minutos después:

Black caminaba por un pasillo, llamando la atención de los presentes.

¿Qué miran?, dijo molesto Black, mientras continuaba su camino, cuando de repente vio a un calvo entrar a una de las habitaciones del lugar. Allí debe ser, expreso.

El joven camino a paso rápido hacia el lugar donde entro el calvo, al tiempo que de un ascensor una peliroja salía.

Solo quiero comprobar si estoy en lo correcto, pensó la hermosa mujer, mientras salía del ascensor, al tiempo que el joven de mirada fría entraba al ambiente donde se grababa el programa de su doble.

¡Gracias por contactarnos Sangha! Fue un gusto para mí haber podido ayudarte, decía Gokú, mientras le hacía un gesto con las manos a su amigo, para que este ponga una pieza musical. Les dejo con el tema musical "Cree en ti".

A los pocos minutos el tema empezó a sonar, al tiempo que el calvo se ponía más blanco que un papel.

¿Qué te pasa Krilín?, dijo Gokú

Ay, mi madrecita...., expreso el calvo, mientras miraba a un furioso joven de mirada fría ingresar al lugar.

¿Qué sucede?, agrego el joven de mirada cálida, girando su rostro, al tiempo que sintió un puño sobre una de sus mejillas.

Oye no seas salvaje, decía con algo de temor Krilín, ganándose la mirada de rabia del joven de mirada fría, mientras el joven de mirada cálida se ponía de pie, tratando de mantener la calma.

¿Qué haces acá?, dijo Gokú con la mayor calma posible.

Aléjate de mi mujer, respondió Black, tomando del cuello de su camisa al joven de mirada cálida, al tiempo que la peliroja entro al lugar.

¡Black! expreso Cirys.

Estoy trabajando, si quieres que hablemos hagámoslo después, dijo Gokú con calma, soltándose del agarre de su doble.

Black, ¿Qué haces?, pronunció Cirys.

No te metas, dijo el joven de mirada fría.

Luego hablamos, espérame fuera, no armes un escándalo mayor, agrego con tranquilidad Gokú.

Tú no eres nadie para decirme lo que debo o no hacer, añadió Black.

Tenemos que volver a salir al aire, decía el calvo.

Hazte cargo Krilín, voy a hablar con él, contesto Gokú, haciendo que el joven de mirada fría sonría con satisfacción.

¡Disculpa Gokú! no debí permitirle la entrada decía Cirys.

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