ROMPIENDO CADENAS

Capítulo 9: Una personalidad que empieza a cambiar

Ya había trascurrido 4 meses desde que Milk se convirtió en la pareja de Black, 4 meses durante los cuales Black había empezado a mostrar de a poco su verdadera forma de ser, aunque ella, siempre justificaba su comportamiento para con ella, pensando que se portaba un tanto desconfiado y alterado debido al estrés por tantas horas de trabajo debidos a sus prácticas y al empleo extra que tenía desde hace un mes, para poder obtener sus propios ingresos, que les permita mantenerse a ambos, ya que desde hace un poco más de un mes, había dejado de percibir el apoyo económico de sus padres, debido a que estos al enterarse que él no estaba solo en el departamento que le pagaban, decidieron quitarle todo su apoyo; al menos eso decía él para justificar los supuestos sobretiempos que hacía en su trabajo o los domingos extras que supuestamente trabajaba desde hace algunas semanas, pero ello no era así, la realidad era otra, sus padres no sabían de la existencia de Milk en la vida de su hijo, pues Black había decidido aún no hablarles de ella, y no por temor a que ellos la rechacen, pues ello era imposible, Milk era el tipo de chica que sus padres deseaban para él, amable, educada, respetuosa, con muchos valores positivos que de hecho cautivaría a sus padres y ni que decir de su físico, ella era muy bella y él lo sabía, además estaba completamente seguro del amor que ella le tenía a él, de ese amor que siempre estaba dispuesto a justificarle cualquier equivocación que él pueda cometer en su relación, sin embargo, a pesar de ello Milk no era capaz de hacerlo sentir pleno, por ello él retomo aquella vida liberal que tenía en la Capital Oeste, fiestas nocturnas, tragos, mujeres.

Gokú por su parte cada día triunfaba más con su programa radial, ahora desde la Capital Central, en cuanto a su vida sentimental, él seguía solo esperando aquella chica que haga latir su corazón con solo oír su voz, aunque su padre seguía insistiendo en que se dé la oportunidad de tratar más a la hija de su amigo.

Departamento de Gokú:

Papá, decía Gokú.

Hijo, ¿al menos sal una vez con ella, pero solo los dos?, escucho.

Los sentimientos no se deben forzar padre, contestaba el apuesto joven de cabello alborotado, con calma.

Ello lo sé hijo, además yo no quiero forzar nada, solo quiero que te des la oportunidad de tratarla de verdad, para que la conozcas hijo, escucho.

La conozco lo suficiente padre, pero está bien, saldré con ella, eso sí, si tras esa cita sigo manteniendo lo que pienso, tu respetaras mi decisión, pronunció Gokú.

Así será hijo, escucho.

Luego de ello, la llamada concluyo, y el apuesto joven de cabello alborotado, tomo su chaqueta, unas llaves, una carpeta y salió de la habitación.

Departamento de Black y Milk:

Un pelinegra tras ver a su pareja alejarse, camino hacia una casita de mascota que estaba a unos metros de la puerta de entrada del departamento y llamo a un pequeño perrito que estaba dentro.

Ven Toby, Black ya se marchó, decía Milk, mientras el pequeño perrito salía de la casita, y caminaba tras de ella hacia su departamento. De seguro debes tener hambre, ¿verdad?, pero no te preocupes, ahora te doy tu alimento, agrego la pelinegra, mientras pensaba: Ni tiempo me dio para preguntarle cuando iremos a Fri pan para ver lo de mi traslado, porque allá el ciclo ya concluyo, ello lo sé por Dieciocho y Bulma, quienes están viendo lo de sus prácticas aquí en la Capital Central, además necesito buscar un trabajo, no es justo que Black cargue con todos los gastos.

Auto:

Hoy por la noche, decía Black, mientras se quitaba el aro de su dedo y lo guardaba en la cajuela de su auto.

Sí, será una fiesta privada, hasta el amanecer, escucho.

Pues cuenta conmigo, contesto el joven de mirada penetrante mientras encendía su auto.