𝐕𝐄𝐍𝐎𝐌 | ❛No todos somos lo que aparentamos. . .❜
Las televisiónes últimamente estaban repletas de noticias, rumoreandose y alternando a la ciudad de la extraña criatura que viaja por los cuerpos de muchos, en busca de un huésped compatible.
Los...
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❛◌*̥₊ 𝒞AP. 15 ELLA ME ELIGIÓ A MI, ¡TARADO!
*ೃ༄
—¡Tom, despierta carajo! —ese fue definitivamente el grito que activo todos mis sentidos. Abrí mis ojos como platos ante el llamado de la femenina, Hanna se le veía apurada con solo verle la cara.
Fruncí el ceño con molestia y un acompañamiento adormilado —¿Qué pingo te pasa? —pregunté. Me senté levemente sobre el sofá cama, viendo el desorden que habíamos hecho en y después de la acción (tremendos mimos) —. Cálmate un poco, mujer.
—¡¿CALMARME?! ¡¡LLEGO TARDE AL TRABAJO, IDIOTA!! —me dijo, gritando como desquiciada. Esta tomó sus pantalones y a saltos y forces logró ponérselos. Todavía seguía en sostén, con el cepillo de dientes en la boca y toda la pasta dental desparramada en ella.
La veía preciosa con o sin defectos, aunque me veo absurdo diciendo que tiene, literalmente es una chica muy perfecta.
«Estásmásilusionado que vieja en tanga, amigo»
Fruncí el ceño automáticamente ante las palabras del parásito, ¿qué carajos trataba de decir? oh, espera... le habrá salido mal el dicho (eso espero).
Hanna salió casi corriendo, ya con sus broches en su fleco y su cabello lleno de rulos. Tomo su bolso, colocándole sus necesarias cosas para el resto del día. Hoy, lamentablemente, le tocaba hora completa.
—Ya debo irme... pero puedes venir a la cafetería para brindarme compañía, si eso quieres —se acercó a paso presurado, para así dejarme un casto beso húmedo. Sentía su brillo labial en la comisura de mis labios.
Se alejo, llegando a la puerta y abrir de esta —¡¡Nos vemos, corazón!! —dicho esto, de un golpe en seco la puerta se cerró.
Un silencio se creó en el ambiente, entonces allí me di cuenta lo ruidosa e iluminante que podía llegar a ser ella. Mire a mis costados, con el objetivo presentarse de acomodar absolutamente todo.
Venom tomó su figura tan chistosa y salió de mi espalda, sus tentáculos húmedos mojaban mi espalda descubierta.
—¿Y tú qué?
«Muero de hambre...»
—Eso problema mío no es, ¿okey? Aguantate, no lo sé.
Su piel cubrió mi cuerpo, tomando el control de mi por completo. Hacia bastante que este no salía, parecía estar bastante escondido tras las enormes catástrofes que han pasado. Aunque, eso no quita que no sigamos en peligro.
