¿Cita?

184 20 8
                                    

Pov Kara:

Mi bebe se había dormido, luego de 4 documentales y 2 partidas de ajedrez que perdió, cayó en el sillón junto a Ónix, abrazándolo, en el momento que Lena se ausento para ir al baño cerro los ojos para, según él, descansar la vista

No tardo ni dos minutos en empezar a roncar, sincronizándose con el cachorro, eran muy tiernos. A decir verdad no me sorprendía, su hora de siesta había pasado hace rato y por lo que se dé le rutina de Ónix, también había pasado su horario, ya eran casi las 20

Me coloque de cuclillas frente a él, acariciando su cabello, sonriendo al ver su rostro dormidito, tan pacifico, sabía que cuando despierte esa paz desaparecería dando paso al enojo por mi renuncia, implicaría que deje de ver a Lena y eso no iba a gustarle ni un poquitito, por eso aprovechaba este momento antes que se desate la tormenta

-Mira lo que te... - me giré rápidamente, llevando el índice a mis labios en una señal de silencio, Lena hizo una mueca de disculpa dirigiéndose al escritorio, cargando tres vasos, fruncí las cejas, acercándome a ella – lo siento, pensé que estaba despierto

-Se durmió recién – aclare viéndola ir a su silla del otro lado del escritorio - ¿desde cuándo sirven café en los baños?

-Siéntate – indico haciéndolo, abriendo un cajón – le pedí a Jess que me traiga dos café y una chocolatada para el pequeño, no salí si eso te preocupa – asentí, sentándome – aunque teniendo en cuenta que renunciaste, no creo que te interese mucho

-Claro que me interesa, Lena – replique acercándole el vaso con su nombre – no quería renunciar, te di mi palabra de que te protegería, pero mi hermana...

-Tu hermana no tiene problema con que sigas trabajando aquí – interrumpió sacando un tablero del cajón, fruncí las cejas – antes de irse me dijo que renunciaste porque creías que le afectaba, cuando sucedió el enfrentamiento más temprano dijiste "no con mi familia, no de nuevo"

-Yo...

-Hay muchas cosas que me estas ocultando - tragué en seco viéndola acomodar las piezas - no es una pregunta – aclaro cuando abrí la boca, no sé cómo me vio estando tan concentrada en su tarea – es una afirmación – alzo la vista brevemente, antes de volver a bajarla – me pides que confié en ti, pero tú no haces lo mismo conmigo

-Eso no es verdad – murmure

-Encima me mientes – baje la vista – no hay nada, absolutamente nada, que odie más que las mentiras, comprendo que hay cosas privadas que no quieres compartir con nadie y lo respeto, no te estoy pidiendo que me relates uno a uno todos los acontecimientos de tu vida

-No quiero ocultarte las cosas, pero hay temas que son... muy difíciles de hablar – la mire, ya había culminado su tarea dejando el tablero en medio, observándome con rostro serio

-Solo te pido que me hables de aquellos que me involucran directamente, porque sé que hay algo ahí que no me estas contando, dices que mi padre no está involucrado y me estoy quedando sin opciones, lo único que consigues con tu silencio es que me interese más en saberlo, soy científica, hasta no obtener una respuesta al problema no me detengo ¿comprendes lo que te quiero decir?

- ¿Me secuestraras en tu sótano y no me liberaras hasta saber lo que quieres? – intente bromear para aligerar el ambiente, para sorpresa de nadie, no funciono

-Podría investigarte – senti mi cuerpo tensarse al instante – tengo el poder, los recursos y la paciencia necesaria para hacerlo – trague – mueve

- ¿Qué? – fruncí las cejas, confundida

-Mueve tu ficha – señalo el tablero – si tu ganas, tienes carta libre para hacer lo que quieras, irte, quedarte, pedirme que deje de preguntarte estas cosas, lo que sea

ChoqueDonde viven las historias. Descúbrelo ahora