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Suga fue un idiota, debió tomar en cuenta las estadísticas de supervivencia de las víctimas de Los cerdos, De acuerdo con los informes y estadísticas, la última víctima que logro sobrevivir fue asesinada el mismo día en un hospital de Colombia, debió imaginar que este casi sería igual y haberse quedado a vigilar durante el trascurso de la noche.

Aterrado comenzó a forcejear todas las puertas en su camino sintiendo desesperación al no encontrar alguna habitación abierta; con desesperación se detuvo para poder observar a su alrededor y al observar el sanitario de damas rodo la silla al lugar y se encerró con seguro.

—Voy en camino al hospital, necesito que me digas con exactitud en qué zona del hospital te encuentras.

—Me encuentro dentro del baño de damas cerca de la salida de emergencia en la primera planta del hospital .— Cuando la puerta del sanitario comenzó a ser forcejeada y golpeada su cuerpo se estremeció y entre lágrimas se aferró aún más al teléfono—. La puerta está cerrada con seguro, pero no creo que logre resistir mucho tiempo cerrada, está golpeando muy fuerte, tengo mucho miedo... No quiero morir... Ayúdame...

—No morirás .—No mientras yo esté vivo y pueda protegerte, pensó—. Te lo prometo. Escúchame atentamente, en los sanitarios de la primera planta hay una rejilla de ventilación en el último cubículo, necesito que seas valiente y soportes todo el dolor que puedas para subir sobre el sanitario, utilizar ambas manos para empujar la rejilla y saltar para sujetarte del borde y entrar.

Jimin tenía una gran desventaja, y esa era su altura; medía aproximadamente treinta y dos centímetros menos que él, por lo tanto, debía soportar todo el dolor que pudiera para lograr subir a la ventilación su vida dependía de ellos.

Se que tú pierna está herida y acabas de salir de una cirugía, pero necesito que seas valiente y soportes todo el dolor para subir a la ventilación, tu vida depende de ello.

Cuando Jimin observó la altura de la rejilla comenzó a negar con su cabeza, no tenía la suficiente confianza en el mismo para lograr subir a tiempo.

Afuera llegaron un par de hombres más, uno de ellos tomo un arma y disparó a la cerradura del sanitario logrando desarmarla y abrirla.

Cuando Jimin escucho el disparo y la puerta ser abierta con brusquedad llevó sus manos a sus oídos, con el cuerpo tembloroso y una pesada sensación en el pecho sollozo.

— No puedo hacerlo.

—Confió en ti, lo lograrás.

Jimin guardo su teléfono en la bolsa del pijama y a pesar del intenso dolor que sentía en todo su cuerpo se levantó de la silla de ruedas y tomando un poco de aire para soportar el dolor que sentía en sus piernas alzo la mirada a la rejilla, después comenzó a subir sobre la taza del baño resbalando cuando escucho la puerta del primer cubículo ser pateada y abierta.

—Ja Ja No tiene sentido que huyas más ¿Dónde estás, pequeña puta? .—Preguntó uno de ellos—.

BUSCANDO RUBIAS Yoonmin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora