Capítulo 36 El perdedor

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     El expreso no tardaba en emprender la marcha cuando Lily entro al compartimiento en donde estaban Regulus, Sirius, Remus y Severus después de saludar a sus amigos se dirigió al lado de Snape y luego de sentarse a su lado lo beso en la boca.

    —Oigan no coman pan delante de los pobres. —Le reclamo Sirius a Lily.

    —De que me acusas, si tú te has pasado haciendo lo mismo todo el verano. —Refuto Lily mientras enlazaba su mano a la de Severus—. Al menos nosotros no nos andamos escondiendo para besarnos.

     —¿Son celos lo que detecto en tu voz escarlata? —Le pregunto burlón Sirius.

    —Ya quisieras canuto. —Le respondió Lily.

     —Ya van a empezar ustedes dos. —Dijo Regulus al tiempo que sacaba un libro.

     —Remus no es mi culpa, ella empezó. —Dijo Sirius rápidamente antes de que su novio pudiera llamarle la atención poniéndole ojitos de cachorro perdido.

    —En serio Sirius. —Empezó Remus a regañarlo mientras Regulus los ignoraba leyendo el libro que tenía en sus manos mientras Lily apoyaba la cabeza en el hombro de Severus y ambos reían de las payasadas que hacia Sirius al intentar calmar a Remus sin saber que eran observados.

    James Potter estaba parado en el pasillo en un punto en el que podía ver hacia dentro del compartimiento donde estaban los hermanos Black, Lupin, Severus y Lily.

    Su Lily. La había perdido y lo peor le toco presenciar como quejicus se le declaro y ella acepto. Todo sucedió en esa maldita reunión que para empezar nunca quiso ir, ya que sería en la casa de los Lestrange y tendría que ver a los traidores de Lupin y Black, pero todo cambio cuando su madre le dijo que los Evans irían así como los miembros de su dichoso club de lectura.

    No podía comprender como su madre podía socializar con miembros de las familias de la fracción obscura, tal vez tenía que ver que el primo de su padre Charlus Potter no veía con malos ojos que su esposa Dorea asistiera y después de eso solo fue cuestión de tiempo para que su madre se uniera.

    En realidad todo empezó a ir mal desde que tuvo que oír como sus padres alababan al maldito grasiento todo porque hizo dos pociones que según su padre cambiarían al mundo mágico.

    Inclusive tuvo que soportar que la madre de Frank Longbottom les diera un discurso sobre seguir el ejemplo del narigón en cuanto termino de saludar a sus padres luego las tontas de Marlene Mckinnon, Mary McDonald y Dorca Meadowes monopolizaban a Lily y no la dejaban sola ni por un momento, ahora que lo pensaba esas inútiles habían hecho todo lo posible para que quejicus y Lily estuvieran juntos.

    Si no eran esas necias era ese tonto club de lectura (que era solo para mujeres, como si él quisiera ser parte de algo tan estúpido) o la cabeza hueca de Dradema Goshawk que acaparo a Hope Lupin y a su Lily para hablar sobre escribir un libro sobre sus experiencias de viaje y como eran de diferentes las culturas de los países que visito y como era una conocida viajera (según ella) tendría mucho que compartir.

    El colmo fue cuando todas las miembros del club empezaron a hablar de ese juego muggle llamado croquet y como empezaron a basarse en el para crear un nuevo juego mágico llamado Magicroq, ahí fue cuando vio la ocasión perfecta para acercarse a Lily, pero sus planes se vieron frustrados por más de una matriarca metiche y perdió su oportunidad de estar en su equipo mientras ese puesto lo tuvo el imbécil grasiento.

Profecía incompletaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora